Elevaron a juicio la causa de la asociación ilícita

ROCA- El fiscal Daniel Drake realizó la elevación a juicio de la causa por asociación ilícita, que se desprendió de la investigación del triple crimen.

Por la causa están imputados los civiles Guillermo González Pino, Miguel Fernández, Héctor Issac Montecino, Sergio Rubén Dávila, y Daniel Alberto Reyes, además de los policías Carlos Raúl Brites, Mario Pérez, José Reyes y José Luis Torres.

Drake planteó en su escrito que con la prueba reunida está establecido que entre el '96 y el '98, los civiles procesados «habrían formado una asociación o banda destinada a cometer delitos en general, y en especial relacionados con estafas con automotores que eran comercializados en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén».

El fiscal manifestó que «González Pino y Montecino serían los jefes de la organización, y a su vez, el subcomisario Torres, el oficial principal Brites, el oficial inspector Pérez y el sargento Reyes, y tal vez otros miembros de la policía, a cambio de información, datos o antecedentes aportados por los mencionados anteriormente, referidos al movimiento del narcotráfico y/u otros delitos, les brindaba protección e impunidad».

A su entender, estos beneficios consistían en no promover la investigación de los delitos en los que ellos (por los civiles) estuvieran involucrados, omitiendo las denuncias correspondientes, o no realizando los controles a los autos que tenían a la venta, ya sea verificando su documentación o el origen de los mismos.

«Es así que el personal policial mencionado formaba parte de la asociación o banda, o le brindaba a la misma una ayuda indispensable para su funcionamiento a través de las conductas antes señaladas», indicó el funcionario.

De los nueve procesados, sólo Brites y Dávila fueron los únicos que prestaron declaración indagatoria.

En su momento, el policía manifestó que Pérez y Reyes, quienes trabajaban en la Brigada de Investigaciones de Allen, le habían comentado que conocían a un delincuente llamado González Pino que tenían un buen dato. El imputado dijo que González Pino le dijo que iba a ingresar un cargamento de 36 kilos de droga en el tanque de nafta de un vehículo.

Posteriormente González Pino le dijo que había volcado su auto, y que tenía que viajar al sur para ver a una persona y obtener datos sobre la droga. Fue así como Brites le facilitó un Renault 18 de la brigada, y al rato le avisaron que lo habían detenido en Cipolletti. Sin embargo, llamó al Juzgado Federal y a la noche fue liberado.

Dávila dijo ser ajeno a los hechos investigados, y negó integrar una banda u organización delictiva.

Según el artículo 210 del Código penal, la asociación ilícita está penada con condenas que van desde los tres a los diez años de prisión.

Pidieron el sobreseimiento

El defensor de González Pino, Fernández y Daniel Reyes, elevó a la Cámara el pedido de nulidad a la solicitud de la elevación a juicio de la causa de la asociación ilícita.

Para el abogado Eves Tejeda, la solicitud de Drake «carece en forma clara de una imputación que permita ejercer el derecho de defensa, instando por ello al sobreseimiento de mis pupilos».

Tejeda cuestionó varios puntos enumerados por el fiscal. Esgrimió que el dato ofrecido del transporte de los 34 kilos de droga «resultó beneficioso para la comunidad», que de la cantidad de autos que tenían los revendedores no hay pruebas de ilícitos, que la cuenta del BanSud de 40.000 pesos estaba sólo a nombre de Montecino -Drake dice que también era de González Pino-, y que en el crecimiento económico de Montecino, también se lo incluyó a González Pino.