Combustibles: cayó la demanda un 15% ante el aumento de precios

La baja en la demanda se da tras los aumentos de combustible y el incremento generalizado de precios en las últimas semanas. En el último mes, la nafta subió un 108%.

La disparada de precios del combustible ya se refleja en los consumos. La demanda cayó un promedio del 15% a nivel país, según expresó el presidente de Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la Argentina (Cecha), Isabelino Rodríguez. En el último mes, los combustibles subieron 108%.

Se trata de una situación atípica para el expendio de combustibles, ya que durante diciembre, enero y febrero de cada año la demanda suele aumentar por la temporada de vacaciones y los traslados que significa. La disminución se relaciona con un aumento de los precios generalizados, no solo del combustible y la consecuente baja en el poder adquisitivo de la población.

Rodríguez explicó en diálogo con Energía On que este porcentaje es una estimación provisoria que hacen desde la confederación, pero que una vez que termine el mes habrá «una idea más clara».

Desde diciembre hasta hoy los combustibles subieron 108% en promedio, lo que llevó a que cerraran el año muy por encima de la inflación, con un aumento acumulado del 268% anual. El 8 de diciembre, justo antes del cambio de gobierno, se aplicó un aumento promedio del 20% en los surtidores. Cinco días más tarde, ya en la gestión de Javier Milei, volvieron a incrementar sus precios un 37%.

Este miércoles se produjo, la última suba que fue del 27%. Estos tres aumentos en menos de un mes generaron un incremento que dobla el precio de finales de noviembre del 2023. Todo indica que es posible que se den nuevas subas en las siguientes semanas o meses, debido a que las refinerías tienen la meta de alcanzar un precio de combustibles en paridad con la importación.

Para ello, si el dólar se mantiene, faltaría un último aumento entre el 20% y 30%. A la vez, habrá que ver qué determinación toma el gobierno nacional con el impuesto sobre los combustibles líquidos (ICL) y el impuesto al dióxido de carbono (IDC), que no se actualizan hace 9 trimestres. De aplicarse, deberían aumentar un 377%, que significaría una suba de $82 el litro en las naftas y $60 en el de gasoil según datos de la consultora Economía y Energía (E&E).

Este panorama genera un creciente interés en pasar los vehículos a GNC. En el último año, las conversiones estuvieron estancadas, según indicó Rodríguez. Aunque el GNC también aumenta, sigue siendo más barato, lo que es un disparador en las consultas y posibles concreciones.


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