Faltan medicamentos en el Castro Rendón

Una profesional del principal hospital neuquino debió pagar un remedio de su bolsillo

NEUQUEN (AN).- La crisis del sistema de salud de Neuquén, según advirtieron profesionales de varias áreas del hospital Castro Rendón, derivó en que en las existencias de farmacia no cuenten con medicamentes esenciales.

Desde la Asociación de Profesionales del hospital neuquino criticaron con dureza al ministro de Salud, Fernando Gore, que el martes adujo que la crisis del sector se centra en la falta de profesionales capacitados y responsabilizó al gobierno nacional en sus políticas.

El faltante en el sector de Farmacia del Castro Rendón salió a la luz el miércoles, cuando luego de realizar los reclamos y no obtener una respuesta desde la subsecretaría de Salud, una profesional del área de Salud Mental pagó de su bolsillo un medicamento que necesitaba en forma urgente. Según indicó, ni siquiera se trata de una droga de nueva generación o baja disponibilidad en el mercado: haloperidol, un antipsicótico esencial en cualquier centro de salud mental.

Cristina Novelo recibió la guardia sin la medicación básica. «Tuve que salir a comprarla de mi bolsillo», indicó. «Ponen en riesgo a los pacientes y a los trabajadores. No es la primera vez que pasa, pero se llegó a un punto en el que no se puede manejar», agregó.

Desde la asociación de profesionales, Cesar Dell'Ali, Amanda Ramat (jefa del servicio de Farmacia) y Graciela Stutman (Salud Mental) respaldaron las denuncias y responsabilizaron al ministerio y a la subsecretaría de Salud, que son los organismos encargados de proveer los medicamentos.

Ramat explicó que no sólo escasea el producto que la médica compró por su cuenta, sino que se trata de un largo listado que alimenta un problema cíclico. «Los faltantes en internación y ambulatorio son constantes y no entendemos a qué se debe. El problema es que tampoco se les paga a los proveedores y, puntualmente, hay proveedores que ya no fían», explicó la jefa de Farmacia. Es que, cuando falta algún medicamento, es el hospital el que, por la urgencia, lo compra a nombre de la subsecretaría. «El haloperidol comprimido es un antipsicótico que se utiliza en patologías graves. En internación lo necesitamos en dosis importantes y a la medicación hay que sostenerla, porque se pone en riesgo al paciente y al personal que está en ese momento», relató Novelo. Aclaró que el reclamo no es por el costo, que ronda los 160 pesos, sino la falta de respuestas, ya que al tomar la guardia había notificado el faltante y, al no recibir un solución adecuada pasadas las 18, decidió adquirirlo por su cuenta.

«Es vergonzoso. Desde 2004 a enero de este año se fueron 233 profesionales, que estaban formados», sostuvo Dell'Ali.


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