Las temibles profecías para 2023 de Baba Vanga, la vidente más famosa del mundo

Antes de morir, la profeta búlgara dejó su anticipo de lo que sucederá en los próximos años. Para este que comienza, adelantó crisis humanitarias y ambientales.

La reconocida profeta búlgara Vangelia Gushterova, más conocida popularmente como «Baba Vanga», anticipó sus predicciones para el 2023 antes de morir. Es que sus videncias, que dejó como legado para la humanidad, se observan en un listado de advertencias que se extienden hasta el año 5079.

Sus pronósticos se volvieron populares ya que anticipó eventos conocidos en todo el mundo como la abrupta muerte de Lady Di, los atentados del 11 de septiembre en Nueva York, el accidente nuclear de Chernobil y la caída de la Unión Soviética.

Por eso, se generó un poco de temor cuando se conocieron las profecías de Baba Vanga para el 2023, porque carecen de optimismo. Según la mujer, el próximo año será escenario de varias crisis humanitarias y ambientales que pondrían en riesgo la supervivencia de la humanidad.

Según la estimación de Baba Vanga, «un gran país llevará a cabo investigaciones sobre armas biológicas en personas, lo que podría provocar la muerte de millones de seres humanos». Esta predicción llevó de inmediato las miradas al contexto bélico del este de Europa, y generó preocupación por el conflicto entre Rusia y Ucrania.

Otro de sus anticipos es la posibilidad de que exista un accidente nuclear provocado por una potencia hacia otro país, que también fue vinculado al conflicto entre el país que conduce Vladimir Putin y Volodímir Zelenski.

Finalmente, la mujer también predijo que una fuerte tormenta solar que podría afectar negativamente a los sistemas de comunicación satelital en el planeta, lo que dejará al mundo prácticamente desconectado. Esto podría ocurrir el 23 de abril del 2023, según lo vaticinó la vidente.

Quién es Baba Vanga


Baba Vanga se hizo famosa a nivel internacional por la eficacia en sus premoniciones y se ganó el respeto. Sus orígenes se vinculan con Strumica, en Macedonia, y debido al temprano fallecimiento de su madre, fue criada por ayuda de los vecinos.

Según ella misma reveló, un tornado la levantó en el aire y la arrojó a un campo a 400 metros. La gente del pueblo la encontró con sus ojos cubiertos de arena y polvo, lo que le produjo la ceguera.

Según sus fieles seguidores, tenía la capacidad de comunicarse con los muertos y tener visiones sobre el futuro gracias a unas criaturas invisibles que le informaban sobre las personas y sus vidas. Antes de morir, a los 85 años, la vidente dejó un oráculo global sobre lo que pasaría en el mundo hasta el año 5079, cuando, según ella, ya no habrá más vida en este planeta.


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