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Causa Otoño: cuarto cambio de jueza en la investigación y el juicio contra la querella

Con la jubilación de Laura González Vitale, otra magistrada quedó a cargo del legajo por el femicidio de la joven de Fernández Oro. La semana pasada comenzó el debate por injurias y calumnias contra la abogada de la querella.

La jubilación de la jueza Laura González Vitale dejó a la causa por el femicidio de Otoño Uriarte prácticamente acéfala por espacio de algunos días. Sin embargo, rápido de reflejos, el presidente del Foro de Cipolletti puso al frente a una nueva magistrada. Guillermo Merlo rechazó la excusación de Rita Lucía y la confirmó para seguir adelante con el legajo.

El caso del femicidio de la joven de Fernández Oro, una vez más, cambiará de actores. El único abogado que se mantiene desde el inicio es Gustavo Lucero, defensor del imputado Maximiliano Lagos. Cuando González Vitale se retiró la semana pasada se abrió el juego de la sucesión.

La Oficina Judicial designó a la jueza de garantías Rita Lucía ya que esta última subrogó en la causa a la funcionaria jubilada durante la feria de enero. Pero Lucía se excusó porque había intervenido en el proceso de instrucción en el inicio de la investigación por la muerte de la joven en 2007.


La excusación de Rita Lucía quedó en manos del presidente del Foro de Jueces y Juezas de Cipolletti, el juez Guillermo Merlo. Este año, el magistrado concentró todo el poder de decisión sobre todo en la designación de funcionarios al frente de causas complejas: primero confirmó a su colega Florencia Caruso al frente del juicio por jurados que se inicia la semana que viene por el homicidio de Facundo Castillo. Y después, en un criticado giro jurídico, apartó a Caruso y se autodesignó. Ahora, optó por confirmar a Rita Lucia al frente de la causa Otoño.


Con Lucía el femicidio iniciará una nueva etapa con la cuarta jueza. Primero intervino María del Carmen García, destituida por su actuación, después la jueza de instrucción Sonia Martín y en tercer lugar González Vitale hasta el día de su jubilación. Esta última condujo con aplomo las audiencias más polémicas que tuvo la causa, sobre todo porque desde el cambio del código procesal en 2017 esas audiencias son públicas.


Por la fiscalía también hubo cambios: primero intervino Oscar Cid, sometido a juicio político por su participación en el caso, después el fallecido José Rodriguez Chazarreta, en tercer lugar el apartado fiscal jefe Santiago Márquez Gauna y, por último, la actual fiscala roquense Teresa Giuffrida.


En cuanto a los defensores, con la excepción de Gustavo Lucero que es el que más conoce la causa, otros abogados que intervinieron, como Eves Tejeda, ya fallecieron. Por la querella participó primero el actual fiscal general de Neuquén José Gerez, luego Marcelo Hertzriken Velasco y finalmente Gabriela Prokopiew, quién impulsó las últimas medidas de investigación.


Para resolver, Merlo consideró que la actuación de Rita Lucía cuando ella era fiscal fue en el contexto del anterior código procesal sin una función relevante para la causa. Sostuvo que los roles cambiaron y que su nueva función como jueza de garantías en este paradigma no le quita imparcialidad, sobre todo cuando ya intervino durante la feria en reemplazo de González Vitale.

La Turca le inició juicio a la nueva querellante

La primera audiencia del juicio contra la abogada Gabriela Prokopiew se inició el jueves en una de las salas de los tribunales de Cipolletti. La denuncia fue promovida por una mujer apodada la Turca, a quien la querellante mencionó en una audiencia que fue pública con su nombre y apellido. La damnificada contó que a raíz de esa cita perdió su trabajo.


El juez Guillermo Merlo está al frente del juicio por calumnias e injurias. Spoiler alert: todos los caminos conducen a Merlo. Con buen tino, el magistrado mantuvo la publicidad de la audiencia pero le hizo lugar a la petición del abogado Rubén Antiguala para que no se difundieran imágenes (ni fotos ni videos) de la mujer.


La Turca fue mencionada en una de las audiencias por el caso Otoño como una de las mujeres que habría retenido a la jovencita en un prostíbulo de Neuquén. Junto con esa mujer que fue identificada con nombre y apellido se introdujo como nuevos sospechosos al excomisario Ives Vallejos y a su chofer, el expolicía Daniel Molina. El abogado de ambos, Guillermo Oviedo, también inició acciones legales contra Prokopiew.


La sospechosa se puso a disposición del Poder Judicial y explicó que ella, hasta el día en que la abogada la mencionó, mantenía dos vidas: su condición de trabajadora sexual bajo el apodo de la Turca y su trabajo formal con el nombre y apellido que figura en el documento.

Sin embargo, según la acusación de Antiguala, Prokopiew unió “esas dos vidas” y le produjo una grave afectación: la mujer perdió su trabajo formal. Merlo invitó a las partes a llegar a una conciliación, aunque el juicio no culminó y se espera una segunda audiencia.


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