La presencia de Burlando alteró la rutina de los tribunales de Cipolletti: ¿será el defensor de Gutiérrez?
El reconocido abogado estuvo de oyente en la audiencia de control de acusación por el crimen de Facundo Castillo, en Cipolletti. Estuvo acompañado de varios letrados que siguieron con atención el litigio para definir a los testigos.
El abogado Burlando junto a parte de su staff de letrados en Cipolletti.
La presencia del mediático abogado Fernando Burlando alteró la rutina matinal del fuero penal de Cipolletti. Es que el profesional, más próximo a los estudios de televisión que a los tribunales, se presentó junto a cuatro abogados de su bufete. Participó como público de la audiencia de control de acusación por el homicidio de Facundo Castillo. ¿Lo contratará la familia del detenido Ramiro Gutiérrez?, una incógnita por el momento.
Fiscales, defensores y querellantes volvieron a sumergirse en el fino y tedioso debate para definir la prueba que dispondrá el jurado popular para juzgar a Ramiro Gutiérrez, acusado de atropellar y matar a Facundo Castillo a la salida de una fiesta en Cipolletti, en diciembre del año pasado.
Pero la atención se fijó en la presencia del abogado Fernando Burlando. Junto a varios integrantes de su bufete -todos vestidos iguales- escucharon el proceso de litigación que, a diferencia de otras audiencias, estuvo más ameno. Fue novedoso para Burlando este sistema de audiencias puesto que el letrado acostumbra a dar sus batallas en el encumbrado fuero federal de Buenos Aires que se mueve bajo la lógica del mundo escritural y del expediente papel.
En Río Negro todo el proceso es por audiencias que son públicas y videofilmadas por cuatro cámaras instaladas en el techo de la sala. En ese aspecto sintió un poco de lo que acostumbra en los estudios de televisión capitalinos. Faltó el maquillaje y los reflectores.
El fiscal jefe Santiago Marquez Gauna, el querellante Juan Coto y los defensores Martín Segovia y Carlos Vila Llanos acordaron gran parte de los testigos que serán citados para el juicio del año que viene.
Trascendió que el marido de la modelo Barby Franco fue contratado por la familia Gutíerrez. Burlando viajó especialmente para ser «oyente» en la quinta audiencia de control de acusación en uno de los casos más densos que tiene la Cuarta Circunscripción y que está bajo la órbita de la jueza Florencia Caruso.
Para sorpresa de propios y extraños, el reconocido abogado esquivó a los trabajadores de prensa. Sí accedió a tomarse fotografías, entre ellas con un policía. Dejó entrever que fue de oyente, pero fuentes allegadas al entorno del acusado revelaron que estarían negociando las condiciones de contratación. No hay detalles sobre si tomará el caso, para eso deberá matricularse en la provincia e instalarse en el Alto Valle para el extenso juicio por jurados.
En el Colegio de Abogados local informaron que por el momento nadie de su estudio hizo averiguaciones para matricularse. Lo cierto es que su presencia con todo el despliegue de abogados no pasó desapercibido en los tribunales de Cipolletti.
Las posibles negociaciones demuestran la capacidad adquisitiva de la familia de Gutíerrez que además de contratar a dos abogados reconocidos en el litigio penal (Vila fue juez, luego destituido) ofreció en su momento cinco millones de pesos de cláusula de caución para evitar que el imputado vaya preso.
Más allá de ese ofrecimiento, la justicia no hizo lugar a ese pedido de prisión domiciliaria y ordenó su detención. Actualmente Ramiro Gutíerrez, acusado de homicidio y cuatro tentativas de homicidio, está preso bajo la órbita del Servicio Penitenciario Provincial.
Planteo por la presencia de fotógrafos
La audiencia había comenzado con el planteo de una hermana de Gutiérrez, quien pretendía evitar ser fotografiada. Para eso invocó su condición de empleada judicial en Valle Medio. Quiso presentar un escrito, aunque se le explicó que todas las peticiones se realizan a través de los abogados de forma oral y en audiencia.
La jueza Caruso, tenaz defensora de la libertad de prensa, rechazó tal pedido. Le dijo que la audiencia era pública y que no estaba obligada a participar. “Si vienen los fotógrafos, usted se puede retirar tranquilamente”, le explicó. Con la presencia de Burlando en la sala, quedó muy claro cuál era el verdadero foco de atención.
Luego de la quinta audiencia se definió una nueva fecha el 16 de diciembre para continuar con el control de acusación. El juicio será el año que viene y a Gutierrez lo juzgarán 12 ciudadanos y ciudadanas del Alto Valle Oeste. Será el segundo juicio por jurados en la Cuarta Circunscripción de Río Negro.
Gutiérrez está acusado de atropellar a Faunco Castillo con intenciones de darle muerte. Ocurrió el 19 de diciembre del año pasado, a la salida de una fiesta en La Nonina, en Cipolletti. El proceso arrastra una infinidad de audiencias con una densa e intensa litigación entre las partes.
Comentarios