La gastronomía cipoleña sigue pisando firme

Las producciones gastronómicas locales califican alto en la región. Hay parrillas, restaurantes, bares, bares de autor y patios cerveceros reconocidos, con cartas que van desde lo vegano y vegetariano hasta carnes de distinto tipo... para elegir.

Redacción

Por Redacción

Ignacio Solari, del bar de vinos Cortez, expresó que hoy en Cipolletti hay una “excelente propuesta gastronómica a nivel regional” que cuenta con la circulación de clientes que vienen de Plottier, de Roca, de Villa Regina, de Cinco Saltos, de Centenario, “nos reservan porque quieren venir a conocer y a disfrutar de la experiencia Cortez”.

En la localidad “hay desde patios cerveceros con una gran variedad y producción local como también pizzerías, casas de empanadas y demás restoranes típicos, con la característica de que Cipolletti está descentralizando un poco toda la propuesta gastronómica”, continuó Solari.

Clientes de toda la región se acercan a disfrutar de la gastronomía cipoleña.

Es decir, ahora no solamente en el centro se encuentran lugares para comer sino también en algunos lugares un poco más alejados con opción de tapeo, parrilla y bebidas.

Solari relató una anécdota de cuando abrieron el local. Por el ambiente musicalizado y descontracturante, “gente amiga nos ha dicho que estamos ‘palermizando’ la zona”, y continuó: “nos dicen que estamos haciendo del barrio San Pablo un Palermo Hollywood como hacen en capital. Eso nos pareció muy divertido”. Además, mencionó que muchos otros locales están abriendo por la zona contribuyendo a esta ampliación.

La buena atención, algo muy valorado y puesto en práctica en la gastronomía local.

Detalló que el objetivo de Cortez es iniciar a todos aquellos que no se animan al mundo del vino a romper con el tabú y que puedan encontrar otra opción a lo que es la cerveza y “tomarlo como quieras”, ya sea con soda, con hielo, en pingüino, en tragos, vino tirado en canilla y demás.

La carta contiene vinos de Salta, de San Juan, de Mendoza y de nuestra región. Este local fue fundado en conjunto con Cecilia Macanek, la dueña a su vez del restaurante Noble Campo, que ya tiene una trayectoria de 10 años en la gastronomía cipoleña.

Macanek explicó que en la ciudad “la oferta gastronómica ahora es mucho más variada de lo que era hace años atrás. Se apuesta bastante más fuerte a la gastronomía. Los lugares que quedamos post pandemia tratamos de hacer cosas nuevas para recrearnos, para reinventarnos”.

Cecilia expuso que lo más difícil es mantenerse en el tiempo de forma pareja y prolija, y que más allá de lo que es propuesta gastronómica “apuntamos mucho a lo que es el servicio para la gente: la cordialidad, la hospitalidad en el lugar, la buena atención, que el cliente se sienta identificado, que el mozo ya sepa lo que va a pedir para ellos es súper importante. Ya saben qué mesas les gustan, qué días van, ya saben qué vinos toman. Eso es como sentirte en tu casa básicamente y que te puedan atender y puedas comer otra cosa que en tu casa no hacés”. Destacó que la gente que trabaja en cocina siempre lo hace con mucha pasión, porque es lo que le gusta hacer.

Mirna Keller, coordinadora de la Dirección Turismo Cipolletti, precisó que en la ciudad hay una gran cantidad de fábricas localizadas que elaboran productos de origen. Esto quiere decir que no solo importa que las fábricas sean de la localidad sino que, además, muchos utilizan materia prima elaborada en sus propios terrenos o en la región.

“Todo el proceso productivo se puede apreciar en las chacras”, declaró Keller. Cosecha, fabricación, comercialización, distribución y degustación conforman este circuito virtuoso.

La oferta son almendras dulces y saladas, ahumadas, con miel y coco. Sidras de manzana verde, manzana roja o pera, en lata o en la tradicional botella que se compra a fin de año. Para algo más dulce aún están los productores de alfajores con dulce de manzana, de pera, ciruela y membrillo.

La ciudad cuenta también con producción de variedades de té utilizando sabores como manzana, peras y todo lo que se produce en la región .

En Cipolletti, la resolución de Turismo Rural permite desde 2011 la posibilidad de generar mini fábricas de elaboración de productos que sean compatibles con la zona productiva. Se establecen por zonificación, capacidad de ingreso de personas y otros condicionamientos, para visitas guiadas y educativas y algunas modalidades de alojamiento que sean acordes con la zona.

La coordinadora mencionó que las actividades son libres, gratuitas y abiertas a todo público y “no solo para los que nos visitan de afuera sino para el propio residente. Para que sepa qué es. Entonces vos venís a Cipolletti y te dicen ‘¿y qué me puedo llevar de Cipolletti?’ y la gente sabe qué. Sabe que podés llevarte de recuerdo, qué podés consumir, con qué podés viajar y llevar para invitar”, y aclaró que desde Turismo hacen visitas guiadas a las pequeñas fábricas en pos de que la gente conozca y reconozca los espacios.


• Kalevala
Federico Franke, uno de sus fundadores, comentó que “hay una movida cervecera muy linda acá en la ciudad. Para mí es uno de los mejores pueblos cerveceros del país” e indicó que “tenemos varias fábricas con muy buenas medallas a nivel internacional y todas en Cipolletti, todas de acá de la ciudad” aunque “no se le da mucha difusión”.

Los responsables de Kalevala destacan la calidad de la cerveza que se fabrica en la zona.

Opinó que Mar del Plata es la capital de la cerveza artesanal por excelencia hoy en Argentina y “no tiene muchas más medallas que las que tenemos acá en Cipolletti. Acá hay fábricas más pequeñas, pero son productos de calidad”.

Kalevala abrió en el barrio San Pablo de la localidad en el 2016. La gran mayoría de productos los venden entre Cipolletti y Neuquén, pero tienen algunos clientes en Roca, Allen, Plottier, Plaza Huincul, Cutral Co, Rincón de los Sauces. El foco está en la norpatagonia, precisamente en el Alto Valle.

Cerveza regional en lata, un rubro que potenció ventas.

También recordó que el año pasado estuvieron más de tres meses cerrados y que “fue un año muy malo. Realmente nos costó mucho. Veníamos de un verano bueno, pero después fue bajar a cero”. Pero que, cuando se empezaron a abrir los comercios “ahí ya empezamos a pensar en que ‘bueno, vamos a sobrevivir’”. Exclamó que ahora se está trabajando bien.

“Nuestra fábrica es chica, somos 3 personas trabajando acá todos los días: dos socios y un empleado que está con nosotros hace cinco años. Explicó que compran todos los insumos a otras provincias y localidades y luego todo el proceso de elaboración de cocción y preparación de recetas lo hacen allí.

• Nihilista
“Siempre nuestro núcleo económico estuvo acá en Cipolletti y Neuquén, pero tenemos algunos puntos de venta en General Roca y en Villa Regina”, dijo Gastón Mich, uno de los socios de esta marca que está conformada por un total de 4 personas en producción.

Comenzaron en 2014 con pruebas y poca producción mientras tramitaban la habilitación, para ya en el año 2015 comenzar de forma comercial y estar en distintos puntos de ventas. “Ese mismo año comenzamos a participar de algunos concursos y a partir de ahí por suerte hemos ganado medallas todos los años en todos los concursos que hemos participado”.

“En nosotros la pandemia lo que hizo fue tener que diversificar la parte comercial. Por suerte desde que empezamos todos los pocos bares con los que empezamos a trabajar siempre fueron los que nos comercializaron todo el volumen. Todo nuestro crecimiento fue a la par del crecimiento de esos puntos de venta también”, explicó.

Tienen 6 estilos de cerveza permanentes en línea de producción. Y por otro lado, 4 o 5 estilos especiales que generalmente son ediciones limitadas o estilos que requieren más tiempo de producción y guarda. Estas ediciones limitadas van rotando en función de la época del año y demás.

• Crafter
Osvaldo “Bugui” Buggiano y Axel Tiemroth son los fundadores de este emprendimiento que arrancó en 2012, y hoy se posiciona entre las cervezas más vendidas de la región. “Empezamos a producir sin saber a quién le íbamos a vender” y, con el paso del tiempo “todo se fue encasillando y tomó rumbo”, comentó Osvaldo.

“Recién hoy estamos haciendo cervezas más comunes, pero al principio eran todas cervezas raras, radicales”

Osvaldo Buggiano, de cervecería Crafter.

Mencionó que desde un primer momento, llevaron a Crafter hacia la elaboración de cervezas especiales inspirándose en estilos que probaban en viajes turísticos y los trataban de replicar con la materia que hay a su disposición. “Recién hoy estamos haciendo cervezas más comunes, pero al principio eran todas cervezas raras, radicales”, aclaró Bugui.

Alrededor de 24 personas conforman el equipo de trabajo hoy por hoy en este negocio y se desempeñan en distintas tareas de elaboración y ventas. “La familia se fue ampliando” y detalló con el tiempo fueron surgiendo nuevos proyectos en conjunto con negocios amigos, como la fusión con el conocido restaurant neuquino Tres Catorce, “sin perder la onda del restaurante pero dándole un toque más a bar”.

“Distribuímos a todo el país, al norte, Comodoro, San Martín, Bariloche, Capital, Gran Buenos Aires, Salta. Ahora con el formato lata más aún”, dijo y recordó que en plena pandemia fue la única forma de “vender unos litros y salir adelante”.


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