La ley del ex y Parra

El 8 abrió el camino con una buena definición, pero no lo gritó. Parra, Rolfi y Vidal se unieron al festejo.

Independiente atraviesa por su mejor momento en la B Nacional, tiene un invicto de nueve partidos y está cada vez más cerca de la zona de ascenso. Ayer derrotó a Instituto por 2-0, en un cotejo por la fecha 20 y dio otro paso fundamental para darle forma al operativo retorno.

El equipo que dirige Omar De Felippe, que hace diez jornadas que no cae en su estadio (sólo perdió ante Brown de Adrogué en el debut por 2-1), se impuso con lo goles de Martín Zapata y Facundo Parra.

Además, su arquero extendió su invicto: hace 666 minutos que no le convierten a Diego Rodríguez (el último que le anotó fue el volante de Unión, Brahian Alemán, a los 9 ST del 1-1 por la fecha 11) y así superó la marca de 642 que estableció el uruguayo Eduardo Pereyra en la temporada 1988-89.

De Felippe apeló nuevamente al dibujo táctico 4-3-2-1 para jugar contra Instituto (29 puntos) y tuvo un correcto funcionamiento colectivo y hasta momentos de buen fútbol.

El equipo lució sólido atrás, Marcelo Vidal le dio equilibrio en la mitad de la cancha; Federico Mancuello, dinámica por la izquierda; Matías Pisano, pinceladas de buen fútbol en la creación y el Rolfi Montenegro, peligrosidad en ataque.

Independiente, con todos esos atributos, generó cinco chances de gol en los pies de Montenegro (12 y 29), Facundo Parra (20) y Mancuello (41 y 43), pero no concretó ninguna, por falencias propias en la definición, en algunos casos, y en otros por las buenas atajadas del arquero Julio Chiarini, el punto más alto de la Gloria.

El conjunto cordobés, con un dibujo 4-2-3-1, trató de defenderse con la pelota, pero le costó recuperarla y conservarla ante la superioridad de su rival.

Si bien es cierto que manejó el balón con cierto criterio cuando lo tuvo, también lo es que careció de profundidad en ataque para lastimar a Independiente.

Y en el inicio de la segunda etapa, a los 6, Zapata puso el 1-0 para con una precisa definición al palo derecho. Por su pasado en Instituto, casi no gritó el gol. Ese tanto le simplificó el encuentro a Independiente que, con la ventaja, se paró para jugar de contraataque. Justamente en una réplica, a los 21, Montenegro hizo toda la jugada y Parra estableció el 2-0.

Después se desató la fiesta en las tribunas del Libertadores de América, más allá de que el resultado no se amplió pese a que Montenegro, Parra y Leonel Miranda tuvieron varias chances más.

La mancha negra de la jornada lluviosa fueron los 27 demorados en la Comisaría Primera de Avellaneda por averiguación de antecedentes y contravenciones, aunque nada vinculado con la interna de la barrabrava del Rojo, según le confiaron varias fuentes policiales.

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