La salida de Carlos Tevez deja al vestuario de Boca sin referentes de peso

La única certeza es la capitanía de Carlos Izquierdoz, pero sin refuerzos de jerarquía a la vista, el objetivo de pelear la Copa Libertadores parece cada vez más lejano.

Momento de quiebre para Boca en su historia reciente. El último líder futbolístico y anímico que quedaba en actividad, decidió dar un paso al costado a seis meses de finalizar su contrato. La salida de Carlos Tevez generó muchas especulaciones sobre las razones, pero él dejó en claro que necesita estar con su familia tras la muerte de su padre.

En el terreno futbolístico, la situación del Xeneize tampoco era muy seductora, con un plantel que ganó mucho más por sus individualidades que por cómo juega, y donde la falta de rebeldía en momentos difíciles fue una de las grandes críticas.

La partida del último ganador en los años dorados del club corta el vínculo directo con los mejores tiempos y tiene un impacto en el corto y mediano plazo.

Ahora, Boca no solo debe reforzarse para ser competitivo sino que necesita construir un equipo sin líderes, algo que parece difícil. Más allá de la segura capitanía de Carlos Izquierdoz, uno de los pocos valorados entre propios y extraños, el Xeneize se quedó sin su máximo referente.

La incógnita del futuro es quiénes tomarán la posta, a sabiendas de lo que implica ser referente en el club. El afamado Consejo de Fútbol tendrá injerencia con los refuerzos que pueda y quiera traer, pero de ninguna forma un líder de vestuario se impondrá desde afuera.

Por experiencia y jerarquía, Marcos Rojo es uno de los que podría tomar ese lugar, pero con lo poco que ha jugado a partir de sus lesiones, parece difícil que se consolide. En algún momento, desde la directiva deslizaron que se buscaba que Esteban Andrada tomara ese lugar, algo que tampoco ocurrió.

Cabe mencionar que el aspecto del liderazgo es clave, porque Boca tiene una mezcla de pibes muy jóvenes, sobre todo en el mediocampo, y otros que tienen perfil bajo a nivel grupal.

Si bien Tevez no había sido descollante, cada vez que apareció fue importante en momentos donde las papas quemaban. Carlitos recordó, en la última conferencia de prensa, el gol a Gimnasia, que le dio el título a Boca en marzo de 2020. Ese tanto es muy simbólico porque el Xeneize hoy tampoco tiene quién lo haga.

En definitiva, el club de la Ribera perdió mucho más que un futbolista de gran carrera y el futuro no parece auspicioso. Por delante están los octavos de final de la Libertadores contra Atlético Mineiro desde el 13/7.


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