Los vocales del TSJ decidirán quien dirigirá la Oficina Judicial Penal de Neuquén
Los postulantes presentarán un plan de trabajo, no habrá examen. El cargo es uno de los más importantes dentro del sistema procesal.
La Ciudad Judicial de Neuquén está desierta. Foto archivo.
Siete postulantes se inscribieron para cubrir la vacante en la dirección de la Oficina Judicial Penal de Neuquén (Ofiju). Si bien el llamado es a concurso externo de oposición y antecedentes, lo cierto es que el procedimiento dista mucho de eso. No hay que rendir ningún examen: quienes aspiran al cargo, uno de los más importantes dentro del sistema procesal, deben presentar un plan de trabajo que será evaluado por los vocales del Tribunal Superior de Justicia. De allí saldrá el ganador o la ganadora.
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La Ofiju tiene a su cargo todas las tareas administrativas: fijar audiencias y grabarlas, citar testigos, organizar los juicios, custodiar los objetos secuestrados. Cada una de las cinco circunscripciones tiene un director.
La remuneración actual de quien ocupe el puesto ronda los 200.000 pesos (de bolsillo). A esto hay que adicionarle otros ítems, por ejemplo antigüedad.
Los inscriptos son: Carlos Fernández, Juan Ignacio Guaita, Cristina Lucca, David Ojeda, José María Piñel, Ana María Rodríguez y Vieira Veridiana Sapag. De los siete, seis cumplen funciones en el Poder Judicial: cuatro en la Ofiju, uno en la defensa pública y una en el área de Impugnación Penal.
El único de los anotados que ha ocupado cargos públicos es Guaita. Fue subsecretario de Justicia durante el gobierno de Jorge Sapag. Se desempeñó como director provincial de Coordinación de la Asesoría General de Gobierno de la provincia.
Para dirigir la Oficina Judicial se requiere título universitario de grado y especialización en gestión. No es requisito ser abogado, aunque quienes ocuparon el puesto con anterioridad si lo eran. Gastón Rosenfeld fue el primero director de Ofiju Neuquén en 2014. En ese momento lo designaron tras un proceso que incluyó examen. “Esto es una picadora de carne”, aseguró cuando dejó la función en 2016. Hoy trabaja en fiscalía.
Lo sucedió Fernando Fuentes en 2016. “Estaba esperando asumir un cargo de responsabilidad”, afirmó. En 2019 rindió para ser fiscal jefe en Chos Malal. Ganó el concurso en el Consejo de la Magistratura y juró a fines de 2019.
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