Masily defendió la calidad de alimentos que provee

ROCA (AR).- «Nuestros productos forman parte de una prestación integral, con una calidad muy alta y numerosos controles. Lo que puede haber fallado es la técnica que usa la Universidad Nacional del Comahue para determinar la cantidad de calcio».

De esta manera deslindó responsabilidades ayer la empresa Masily, asegurando que los alimentos provistos a miles de chicos en las escuelas rionegrinas cuentan con todos los nutrientes necesarios para garantizar un correcto crecimiento.

Las afirmaciones fueron realizadas por un equipo técnico que desembarcó en Roca luego del alerta generado por un informe pedido por la Unter a la Facultad de Ingeniería, que advirtió la baja proporción de calcio y proteínas de la comida comprada por el gobierno en relación a la leche entera en polvo.

En la defensa al millonario contrato que mantiene la firma con el Estado rionegrino los representantes de Masily anunciaron que iniciarán acciones legales a quienes cuestionaron sus productos, aunque no especificaron a quién denunciarían.

Lo que sí confirmaron fue un rumor que recorría las calles de Roca desde hace tiempo: el representante de Masily en Río Negro es el roquense Daniel Fernández, ex directivo del otrora gran proveedor del Estado, Rocafé, y a quien públicamente se lo reconoce como miembro del círculo íntimo del actual legislador radical Daniel Sartor.

El contrato entre la empresa mendocina y el Estado rionegrino data de 1997, según informaron ayer sus técnicos, cuando Sartor era ministro de Salud y Acción Social. Este área era el que canalizaba la provisión de alimentos a los comedores de la provincia. No obstante, se destacó que Fernández trabaja en Masily aproximadamente desde el año 2000.

Durante el miércoles y ayer los profesionales de Masily s reunieron con autoridades de la Facultad de Ingeniería de la UNC.

Ante la prensa se indicó que los 370 miligramos de calcio hallados por la casa de estudios en 100 gramos del alimento «Le Burguet» se convierten en 1.180 cuando los análisis son realizados en la planta de la proveedora.

«Puede haber fallado la técnica de control y es posible porque hay distintos mecanismos para estudiar la composición de los alimentos. No dudamos para nada de la idoneidad de los profesionales de la universidad y por eso nos vamos a juntar con ellos para trabajar en conjunto», expresó María Eugenia Cantaloube, jefa de Control de Calidad en Masily.

La responsable de Investigación y Desarrollo, María Farah, agregó que la comparación realizada entre alimento a base de leche y leche entera en polvo «no es aplicable», porque las prestaciones de la firma cuentan con diversos ingredientes adicionales, como azúcar, café, cacao, entre otros.

En tanto, el gerente de la División Sabores, Luis Romito, aseguró que las quejas de docentes y padres sobre el mal gusto de los productos no conforman un dato objetivo. Exhibió como contracara un estudio realizado por el Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil, que ubica en el 3 por ciento al nivel de chicos que rechazan el alimento provisto en los comedores.

Romito consideró que luego de difundirse el informe de la UNC «hubo inferencias que se prestaron a la tergiversación».