Máxima tensión en Rusia: tomaron de rehenes a 132 niños en escuela

BESLAN, Rusia.- Un comando de unos 17 hombres y mujeres armados que reclama el retiro de las tropas rusas de Chechenia mantenía secuestradas anoche a unas 300 personas, entre ellos 132 niños, en una escuela de Osetia del Norte, una república rusa del Cáucaso. Los atacantes, que llevan cinturones con explosivos, amenazan con volar la escuela y matar a 50 escolares por cada una de sus bajas.

El ataque comenzó con un tiroteo en la escuela que causó nueve muertos (entre ellos dos docentes y tres padres). Dos personas, incluido un asaltante, murieron en el acto y otras siete, heridas, fallecieron en el hospital.

Los 132 niños están bien, según informaron los propios secuestradores y las autoridades rusas. Ninguno resultó herido en el ataque durante la toma de la escuela.

Las autoridades rusas no acusaron a los separatistas chechenos de estar detrás de este secuestro pero la proximidad geográfica de la república rebelde y la posibilidad de que mujeres kamikazes cometieran los últimos atentados en Rusia hacían esta teoría más plausible.

El dirigente separatista checheno Aslan Masjadov que «los innumerables crímenes contra la humanidad perpetrados por Rusia en la tierra del Caúcaso hacían posibles respuestas inhumanas desesperadas como la acción de ayer, por parte de hombres que pierden la razón» a causa del sufrimiento.

Desde la escuela, un hombre dijo al diario estadounidense New York Times que representa al Segundo Grupo de Salakhin Riadus Shakhidi, un contingente rebelde que se sospecha es dirigido por un famoso comandante rebelde checheno, Shamil Basayev. Este último reivindicó el secuestro en un teatro moscovita en octubre de 2002.

La escuela, situada en Beslan, una ciudad de unos 40.000 habitantes a 20 km al norte de Vladikavkaz, la capital de Osetia del Norte, estaba rodeada por un gran nú

mero de vehículos blindados y camiones del ejército.

A última hora, el FSB declaró que en total había unos 300 rehenes. Antes, la célula de crisis estableció el número de niños en 132, basándose en las declaraciones de las familias.

Confrontado al segundo acto terrorista en menos de 24 horas, después del atentado que el martes por la noche dejó 10 muertos en Moscú, el presidente ruso Putin regresó urgentemente a la capital rusa el miércoles, desde Sochi, en el Mar Negro.

Convocó inmediatamente al ministro del Interior, al jefe del FSB y al de la guardia de fronteras, pero no hizo ninguna declaración pública.

Los secuestradores, vestidos de negro y encapuchados, llegaron en dos vehículos, entre ellos un camión de la policía que habían robado, e irrumpieron en la escuela que había organizado ayer una ceremonia para celebrar el regreso a las clases, como en todos los colegios rusos el 1 de septiembre. Los niños fueron encerrados en el gimnasio de la escuela, que fue minada por el comando, que amenazaba con hacerla saltar por los aires.

Los secuestradores piden negociar con los presidentes de Osetia del Norte y de la vecina Inguchia y reclaman la liberación de personas detenidas en Inguchia después de los ataques del 22 de junio, reivindicados por los rebeldes chechenos.

Se negaron a hablar con el mufti local y quieren entrevistarse con el doctor Leonid Rochal, un famoso cirujano que participó en la mediación con el comando que llevó a cabo el secuestro del teatro en Moscú, que llegó a Beslan a última hora del miércoles.

El FSB señaló que las negociaciones proseguían el miércoles por la noche y que «ningún niño resultó herido», según el comando. Este secuestro se produce ocho días después del doble atentado en dos aviones de línea rusos, probablemente cometido por dos mujeres supuestamente chechenas, que dejó al menos 90 muertos.

El presidente estadounidense George W. Bush ofreció a Putin toda la ayuda que necesite para resolver la crisis, según el Kremlin.(AFP y DPA)

Usaron a los chicos como escudos humanos

OSETIA.- El grupo comando, formado por al menos 17 personas, entre hombres y mujeres, ingresó en una escuela de la ciudad de Beslan, donde colocó a varios niños en las ventanas como escudos humanos para evitar que las fuerzas especiales disparen contra el edificio.

Beslan es una ciudad de casi 40 mil habitantes, situada a 20 kilómetros de la capital de Osetia del Norte, Vladivkavkaz. Según la agencia Interfax, 50 escolares lograron escapar de la escuela, aunque Itar-Tass sostuvo que sólo 15 lograron huir del edificio. Los niños tienen entre 6 y 17 años.

«Nos escondimos en la escuela y logramos huir», dijo uno de los niños que logró salir del edificio, al ser entrevistado por televisoras locales.

El gobierno del presidente ruso, Vladimir Putin, creó un comité de crisis en Beslan, desde donde mantuvieron contacto con los miembros de la célula, que organismos de inteligencia vinculan con el líder guerrillero checheno Shamil Basaiev.

«En uno de nuestros contactos, los terroristas nos dijeron que los niños estaban bien, que ninguno de ellos está herido», declaró el jefe del FSB en Osetia del Norte, Valeri Andreiev. Reiteró que no había ni alimentos ni agua en la escuela, y que el comando se había negado a aceptar una entrega de víveres o agua.

Infograma: Escuela tomada por terroristas (Hacer clic acá) Nota asociada: La política antiterrorista de Putin hace agua  

Infograma: Escuela tomada por terroristas (Hacer clic acá) Nota asociada: La política antiterrorista de Putin hace agua