¿Fin de una polémica tradición? Islandia suspendió la caza de ballenas para cumplir con una ley

El 51% de los islandeses se oponen, cifra sensiblemente superior a la registrada hace cuatro años. Por el momento, Islandia, Noruega y Japón son los únicos países que permiten la caza de ballenas.

El gobierno de Islandia anunció hoy la prohibición de caza de ballenas hasta finales de agosto dado que dicha actividad no cumple con las leyes de bienestar animal vigentes en ese país, decisión que podría significar el principio del fin de esta polémica tradición.

«He tomado la decisión de suspender la caza de ballenas» hasta el 31 de agosto, dijo la ministra de Alimentación, Svandis Svavarsdottir, después de que un informe de una comisión gubernamental estableciera que la caza de cetáceos no cumple con las leyes de bienestar animal de Islandia.

«Si el gobierno y los titulares de permisos (de caza) no pueden garantizar los requisitos de bienestar, esta actividad no tiene futuro»,

añadió la ministra, dando a entender que esta práctica está llegando a su fin, según consignó un despacho de la agencia AFP.

Hvalur, la única compañía de caza del país, había anunciado en el pasado que esta temporada sería la última debido a la disminución de la rentabilidad y mientras dure la veda sus barcos permanecerán atracados en el puerto de Reykyavik.

La temporada de caza de ballenas en Islandia se extiende desde mediados de junio hasta mediados de septiembre, pero es poco probable que se reanude después del 31 de agosto.

Las cuotas anuales permiten la cacería de 209 rorcuales comunes -el segundo mamífero marino más largo después de la ballena azul- y 217 rorcuales pequeños, pero las capturas fueron mucho más bajas en los últimos años debido a la disminución de la demanda de carne de ballena.

La oposición a esta práctica es ahora mayoritaria entre la población y el 51% de los islandeses se oponen, cifra sensiblemente superior a la registrada hace cuatro años cuando el 42% estaba en contra de esta actividad, según una encuesta realizada por el Instituto Maskina y cuyos resultados se hicieron públicos a principios de junio.

El eje de la decisión de la veda se basó en que la matanza de estos cetáceos provoca largas agonías en los animales por lo que la vuelve violatoria de la ley islandesa, según un informe de las autoridades veterinarias del país.

En el informe realizado por los especialistas se adjuntaron imágenes en los que se observa la agonía de casi cinco horas que sufrió una ballena cazada el año pasado. Por el momento, Islandia, Noruega y Japón son los únicos países que permiten la caza de ballenas.

Agencia Télam.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios