Guardavidas advierten por nuevos peligros en el Limay

Todos los veranos las costas del Limay son el principal espacio recreativo de los neuquinos. Cuando el calor se vuelve intenso miles se acercan a los balnearios para pasar el día y refrescarse en el río. Pese a que las zonas son conocidas por los vecinos, desde el cuerpo de Guardavidas recomendaron consultar antes a los responsables por los cambios que todos los años genera el cauce.

“En Neuquén si la gente va por primera vez o si ha ido y no ha consultado a los guardavidas los lugares peligrosos, les pedidos que se arrimen y nos pregunten”, señaló Ariel Tarifeño, secretario general del Sindicato de Guardavidas de Neuquén (Sigune).

Conocer cómo es cada sector del Limay ayuda a que “no se asusten si caen en algún pozón o si los lleva un poco la correntada”.

Recordó que donde se juntan los brazos del cauce “es señal de peligro. Cuando se juntan dos corrientes que generalmente vienen con distinta fuerza permite que se forme un remolino”.

Otra indicación es bañarse solo en los sitios habilitados. Recordó que hay lugares muy concurridos pero que no están permitidos como ocurre en “calle La Pampa al fondo, Isla Verde e Isla 132”.

Una de las principales recomendaciones es para que los padres no descuiden a sus hijos. No solo cuando ingresan al agua sino que también en los espacios de esparcimiento.

Desde el comienzo del operativo de seguridad balnearia ya se realizaron en la capital siete rescates.

“El sábado y domingo 1 y 2 de diciembre hubo dos rescates. Uno fue en Río Grande donde un chico de 13 años quiso cruzar el río y se cansó a la mitad. Hubo que ayudarlo a salir. Y otra en un brazo en la Isla 132 que no es zona balnearia”, contó Tarifeño.

En los días siguientes se registraron cinco intervenciones : dos en Río Grande, dos en Sandra Canale y el restante al fondo de calle La Pampa.

“En Río Grande generalmente pasa que tratan de cruzar a nado. Muchos creen que van a hacer pie enseguida y como no llegan generalmente se asustan y empieza a pedir auxilio”, comentó el guardavidas.

En números

Ariel Tarifeño, secretario general del sindicato de Guardavidas.

“En Río Grande generalmente pasa que tratan de cruzar a nado.
Muchos creen que van a hacer pie enseguida y como no llegan generalmente se asustan y empieza a pedir auxilio”.