“No rebatieron nuestros argumentos”

NEUQUÉN (AN).- Los defensores de los militares Francisco Oviedo –María Cecilia Oviedo y Hernán Elizondo– y Enrique Olea –Gerardo Ibáñez– reiteraron ayer el pedido de absolución de sus defendidos y consideraron que las críticas de los acusadores no contrarrestaron sus planteos. “No han sido rebatidos ningunos de los elementos que planteamos”, dijo Ibáñez en la apertura de las dúplicas defensistas. Insistió en que la descripción de los hechos no encuadraron en la categoría de “genocidio” que planteó el Ceprodh y que los delitos que se le atribuyó a su defendido no podían ser considerados como de lesa humanidad, porque no pertenecían al derecho interno hace 30 años atrás. “Las defensas no consentimos las nulidades por haber participado de este juicio, lejos de consentirlas, existen. ¿Qué teníamos que hacer, irnos?”, se preguntó Ibáñez en clara respuesta al fiscal Marcelo Grosso. Por su parte Elizondo mantuvo el pedido de absolución de Oviedo. Solicitó la anulación de las acusaciones por deficiencias en la descripción de los hechos y por “carencia de fundamentos”. Argumentó que los hechos invocados para su imputación fueron derribados por la prueba en el juicio y el testimonio de Pedro Maidana. “Si hubo una defensa que pidió que se tuviera en cuenta la totalidad de los dichos de la víctima, fue ésta”, remarcó María Cecilia Oviedo.


NEUQUÉN (AN).- Los defensores de los militares Francisco Oviedo –María Cecilia Oviedo y Hernán Elizondo– y Enrique Olea –Gerardo Ibáñez– reiteraron ayer el pedido de absolución de sus defendidos y consideraron que las críticas de los acusadores no contrarrestaron sus planteos. “No han sido rebatidos ningunos de los elementos que planteamos”, dijo Ibáñez en la apertura de las dúplicas defensistas. Insistió en que la descripción de los hechos no encuadraron en la categoría de “genocidio” que planteó el Ceprodh y que los delitos que se le atribuyó a su defendido no podían ser considerados como de lesa humanidad, porque no pertenecían al derecho interno hace 30 años atrás. “Las defensas no consentimos las nulidades por haber participado de este juicio, lejos de consentirlas, existen. ¿Qué teníamos que hacer, irnos?”, se preguntó Ibáñez en clara respuesta al fiscal Marcelo Grosso. Por su parte Elizondo mantuvo el pedido de absolución de Oviedo. Solicitó la anulación de las acusaciones por deficiencias en la descripción de los hechos y por “carencia de fundamentos”. Argumentó que los hechos invocados para su imputación fueron derribados por la prueba en el juicio y el testimonio de Pedro Maidana. “Si hubo una defensa que pidió que se tuviera en cuenta la totalidad de los dichos de la víctima, fue ésta”, remarcó María Cecilia Oviedo.

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