Otra condena por despidos en el Instituto de Vivienda

JUSTICIA

La Cámara Laboral falló en favor de Romina Sambataro, una de las empleadas despedidas por el Instituto Municipal de Tierra y Vivienda en el inicio de la gestión de Omar Goye, y condenó al organismo a pagar 60.717 pesos de indemnización y 21.250 pesos de honorarios a los abogados que intervinieron en el litigio judicial.

En el mismo fallo ordenó al Instituto que entregue a la damnificada el certificado de trabajo previsto por la ley, que hasta el momento le fue negado, en un plazo máximo de diez días, bajo apercibimiento de aplicar una multa de 150 pesos por cada jornada de incumplimiento.

Al fundamentar la decisión, el juez Ruben Marigo señaló que la relación laboral de Sambataro se encuadró con contratos de locación de servicios y de obras, que calificó de “claramente fraudulentas” y reconoció los dos años y ocho meses de antigüedad en el desempeño de labores administrativas que el Instituto de Vivienda intentó desconocer.

La mujer ingresó al municipio el 1 de mayo de 2009 y realizó el mismo tipo de tareas bajo distintos contratos transitorios hasta el 30 de diciembre de 2011, momento en que quedó desvinculada junto con otros trabajadores a los que no se les renovó la relación contractual.

Marigo destacó que el vínculo laboral establecido con la trabajadora debió encuadrarse en las previsiones de la Ley de Contrato de Trabajo, y citó otros dos casos idénticos que llegaron al Tribunal en los que el Instituto de Tierra y Vivienda utilizó formas de contrato fraudulentas y no pudo invocar irregularidades que justificarán el despido de los trabajadores.

El fallo al que adhirieron los demás miembros del tribunal consideró que Sambataro fue despedida el 22 de diciembre del 2011 y que “atento haber trabajado marginada son procedentes las sanciones de ley conforme jurisprudencia que cita siendo incuestionable la aplicación de la ley”.

DeBariloche