Peleón, empate y revancha

Boxeo

“Yo gané siete, ocho asaltos fácilmente. Fui superior en el cuadrilátero”, largó el Canelo Álvarez luego de la batalla.

“Yo sólo me enfoco en pelear. Fíjense en mis cinturones. Sigo siendo el campeón. No he perdido”, afirmó Gennady Golovkin.

Los colosos del boxeo mundial se sintieron ganadores después de 12 asaltos electrizantes, pero el fallo marcó empate.

Dos de las tarjetas fueron muy parejas y marcaron 115-133 para GGG y la otra señaló 114-114. Pero la veterana jueza Adalaide Byrd dio un irreal 118-110 a favor del mexicano. Lo mejor de esto es que hay revancha asegurada.

El kazajo retuvo sus cetros del peso mediano y los mostró con orgullo en el colmado T-Mobile Arena de Las Vegas.

El combate cumplió de sobra con las expectativas porque no se guardaron nada. Tampoco ninguno cayó ni terminó con heridas serias. Eso sí, ambos pudieron calzar potentes golpes a los rostros.

Golovkin fue el agresor de principio a fin, pero sin derribar al ídolo mexicano. Álvarez supo responder en sus intercambios, aunque hubo una constante: pegó en el primer minuto y pareció quedarse sin resto en los otros dos.

En el final levantaron los brazos en señal de victoria y saltaron a los brazos de sus equipos, pero las tarjetas dijeron otra cosa.

Las estadísticas marcaron que Golovkin conectó 217 golpes en 703 intentos mientras que Álvarez materializó 169 en 505. ¿Cómo será la parte II?