Periodistas y escritoras, en el pase del discurso de género a la acción

La Asociación Mundial de Mujeres Periodistas y Escritoras (Ammpe) dio a conocer las primeras conclusiones de su XIX Congreso realizado en Buenos Aires entre el 10 y el 12 del corriente. La actividad, declarada de interés nacional, y de la que participaron comunicadoras, docentes, estudiantes y escritoras finalizó con la elección la taiwanesa Li Yanqui como nueva presidenta de Ammpe, quien sucederá a la periodista rionegrina Nily Povedano, nominada vicepresidenta de todos modos. Se resolvió también que el XX Congreso, en 2012, se realizará en China. “Los nuevos paradigmas de la comunicación en la Era digital” fue el eje que enhebró los ricos debates a cargo de especialistas y referentes de Ammpe de Argentina, Brasil, Chile, Perú, España, Alemania, Taiwan, África y Colombia entre otros países. A continuación, en apretado resumen, las conclusiones alcanzadas: • En la actualidad la comunicación debe producirse en sintonía con los nuevos escenarios y realidades del mundo. Es decir, en el marco de un nuevo paradigma que recorre lo social, económico, político, ideológico, religioso, etc., que abarca todos los aspectos de nuestra vida, y modifica nuestras formas de pensar, sentir y hacer. • Estamos en un mundo diferente, en constante mutación, signado por la complejidad, la incertidumbre y la impredecibilidad. No hay un guion escrito, ni leyes naturales irrefutables. Colapsan las instituciones tradicionales y los liderazgos a la vieja usanza. En todos los ámbitos del planeta están sucediendo fenómenos que todavía no podemos definir, muchos de los cuales ni nombre tienen. Este quiebre significa que (se debe plantear) un nuevo modelo comunicacional que permita estar en sintonía con este proceso de cambios sin precedentes en la historia de la humanidad. • Esta nueva realidad coloca a las y los comunicadores como protagonistas de un tiempo diferente, y en este proceso la sensibilidad y la mirada femenina, más humana, más inclusiva y más integradora, puede aportar mucho al cambio . • El desafío es también incorporar nuevos temas en la agenda pública, no sólo a través de los medios de comunicación tradicionales, sino también mediante el mundo digital. Esto implica poner en foco temas que pasan inadvertidos, como la violencia extrema en todas sus expresiones, la exclusión social, los desastres ecológicos y los colapsos financieros, la propagación de enfermedades. • Hace falta un tratamiento igualitario en el discurso mediático. El camino hacia la igualdad de género no es una meta sectorial, sino parte de un proceso político. Por lo tanto se necesita de varones y mujeres, más allá de las diferencias (de manera de) contribuir (desde el periodismo) a promover procesos de subjetivación donde las mujeres dejen de ser pensadas como víctimas. • Hay que pasar (como comunicadoras) de la victimización y la mera denuncia, a generar procesos de transformación. • Ante el desvanecimiento de cualquier verdad definitiva, (a las) periodistas les cabe el compromiso de contribuir al incremento del capital social, a través de mensajes que promuevan el diálogo, el consenso, la cooperación, la solidaridad, el respeto a la diversidad, los valores éticos y la comprensión. Sin olvidar que los valores éticos de un país son parte de sus recursos productivos. El evento contó con el apoyo de la Fundación para el Desarrollo del Sur Argentino, el patrocinio de Unesco y Naciones Unidas.