El asado con hueso se vende en Neuquén 50% más barato tras 24 años de barrera sanitaria

Las bocas de expendio ofrecen el producto que es introducido desde el norte del río Colorado. La oferta es restringida porque el clima limita la tradicional cocción al aire libre.

El arribo del asado con hueso desde el norte del río Colorado comenzó a modificar las reglas del mercado cárnico patagónico. La medida, habilitada tras la flexibilización de la barrera sanitaria, provocó un ajuste inmediato en la estructura de precios y generó un efecto visible tanto en carnicerías de Río Negro como en Neuquén.

La expectativa de los actores comerciales es que la ampliación de la oferta permita estabilizar los valores y reduzca la presión que, durante años, caracterizó al mercado de carnes en la zona libre de aftosa sin vacunación.

La cadena de carnicerías de Perticone y Tierra del Fuego; y Alcorta y Gatica fue la primera en ofrecer al público cortes con hueso a 11.999 pesos el kilo, lo que representa una reducción del 50 % frente al valor de 17.850 pesos que registró el INTA para el kilo de asado sin hueso en la región.

En paralelo, la cadena que lleve el apellido del dueño de la planta, con sede en La Adela, anunció que en los próximos días comenzará a distribuir asado con hueso en sus puntos de venta.

También se espera el ingreso de este corte en las carnicerías propias de dos cadenas de supermercados con presencia en Neuquén, donde hasta ahora el valor se ubicaba en los 17.500 pesos por kilo pero sin hueso.

Los dos mayoristas de carne de los que se abastecen cadenas de supermercados y carnicerías de venta de carne envasada, indicaron que ingresarán el producto pero no indicaron la fecha ni el precio estimado.

La baja de precios coincide con una caída del 24 % en la faena regional registrada por el SENASA durante los primeros meses del año, lo que equivale a unas 18.000 cabezas menos en comparación con igual período del año anterior.

Esta disminución en la producción, sumada a la estacionalidad de la demanda -particularmente sensible al clima-, modificó el comportamiento de los consumidores y de la oferta.

En marzo, con fines de semana soleados, el kilo de asado con hueso en Neuquén alcanzó los 19.850 pesos, mientras que el actual escenario de menor demanda favorece el ingreso de productos del norte del país, que ofrecen precios más accesibles aunque con diferencias en calidad y presentación.


Precios artificiales por restricciones sanitarias


Un actor del mercado cárnico de Neuquén señaló que esta apertura permite ampliar el abanico de opciones y corregir una estructura de precios artificialmente elevada por las restricciones sanitarias previas.

Esta apertura representa una corrección necesaria en un esquema que, desde la declaración de la Patagonia como zona libre de aftosa sin vacunación en 2001 (hubo un brote de fiebre aftosa al norte del río Colorado), implicaba un sobrecosto estructural de hasta el 30 % en la materia prima.

La medida permitiría legalizar una práctica informal ya extendida: gran parte del asado que actualmente se consume en la región ingresa de manera clandestina, con evidencias documentadas de contrabando en volúmenes relevantes.

El cambio normativo también apunta a ampliar la oferta disponible.

La industria cárnica del norte del país posee capacidad para procesar distintas categorías de animales, lo que genera una gama de calidades y precios inaccesibles en el sur.

En la nueva coyuntura, se espera que el consumidor patagónico pueda acceder a cortes más económicos -como el costillar de vaca– junto a opciones premium, equilibrando así la segmentación por poder adquisitivo.


Mollejas de EE.UU libres de aftosa


En paralelo, se observa una oportunidad específica para ciertos cortes de alto valor simbólico y comercial, como las mollejas.

Desde una de las firmas de venta mayorista de carne envasada se hizo mención al ingreso de mercadería estadounidense, subrayando que Estados Unidos se posiciona como un proveedor competitivo en subproductos de calidad superior.

Las mollejas, por sus características organolépticas y su posicionamiento en el mercado gourmet, representan una ventana de diversificación y una posible presión a la baja en los precios actuales, donde se mantenía una estructura rígida por falta de competencia externa.

Estados Unidos está considerado libre de aftosa sin vacunación al igual que Brasil aunque su calidad de producción cárnica no satisface los paladares argentinos.

Al tratarse de hueso plano, es mínimo el riesgo vinculado a la transmisión de enfermedades como la aftosa, algo que ya había sido aprobado en experiencias anteriores, como en 1995, sin consecuencias negativas registradas.
Fuentes del SENASA pidieron que se aclare que la oferta de asado con hueso estará restringida a quienes ya venían ingresando carne sin hueso envasada desde el norte del río Colorado. La aclaración vale para aquietar a consumidores que adquieren el producto en carnicerías de menor escala que compran la media res y la trozan. Estas medias reses son animales que se faenan en las plantas de la región que abastecen a líneas de carnicerías propias o de terceros.

Los mayoristas de carne envasada y las góndolas de las cadenas de supermercados sí podrán participar de la flexibilización de la barrera porque tienen un circuito armado para traer carne de sus propios frigoríficos o bien adquirir en el mercado regional a los mayoristas que se abastecen de plantas ubicadas en la zona libre de aftosa con vacunación.


Carnicerías independientes esperan la oportunidad


Agencias Viedma, Redacción General Roca y Agencia Bariloche

El ingreso de carne con hueso proveniente del norte del río Colorado comenzó a materializarse en carnicerías de Río Negro, especialmente en General Roca y Viedma.

La medida se dio tras la flexibilización de la barrera sanitaria por parte del gobierno nacional y generó expectativas de una baja en los precios del asado y la falda, que podrían reducirse entre un 20 % y un 40 %.

Comerciantes locales reconocieron que parte del producto ya está en circulación, aunque advirtieron sobre diferencias en la calidad, debido a que proviene de animales de mayor tamaño y carne más grasa.

En el Alto Valle, comercios de ciudades como Cipolletti, Allen y Cinco Saltos confirmaron el arribo de partidas o, al menos, la recepción de ofertas de frigoríficos de Córdoba y Buenos Aires.

Algunos comercios ya venden el nuevo producto a valores en torno a los 12.000 pesos por kilo, frente a los precios anteriores que oscilaban entre 16.000 y 20.000.

A pesar del abaratamiento, persisten reservas sobre la aceptación del consumidor final, especialmente en regiones acostumbradas a carnes más tiernas, como las del Valle.

En Bariloche, por el momento no se registró una oferta efectiva de asado con hueso del norte, aunque algunas carnicerías aguardan partidas en los próximos días.

La mayoría continúa trabajando con cortes de origen local, pertenecientes a la zona libre de aftosa sin vacunación.

Los comerciantes expresaron incertidumbre sobre los precios finales y la recepción del nuevo producto por parte del público, mientras persiste cierta desconfianza alimentada por desinformación y rumores sobre la calidad y procedencia de la mercadería.

En la carnicería Patagonia, el responsable consultado dijo que solo trabajan con carne de Fridevi (de Viedma) y hasta hoy no han recibido planchas de asado desde el norte, aunque les informaron que llegarían esta semana o la próxima, «a un precio más económico». La precisión es que el asado de ese origen costaría 17.000 pesos, cuando hoy ese local lo ofrece a 20.000 o 21.000 pesos, según la calidad