Reestructuración en el INTA: el Gobierno de Jaivier Milei ratificó a Nicolás Bronzovich como presidente

Se oficializó este jueves, a través del Boletín Oficial. La medida lo convirtió al organismo en un ente desconcentrado. "Se busca el vaciamiento y destrucción de las capacidades del INTA", sostuvo el ministro de Desarrollo Agrario de Buenos Aires.

El Gobierno de Javier Milei oficializó este jueves, a través del Boletín Oficial, la profunda reforma en el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). La medida lo convirtió en un ente desconcentrado, eliminando su autarquía y su histórica estructura directiva tripartita, que había funcionado desde su creación. «Se busca el vaciamiento y destrucción de las capacidades del INTA«, sostuvo el ministro de Desarrollo Agrario de Buenos Aires.

En el marco de esta reestructuración, el ingeniero agrónomo Nicolás Bronzovich fue ratificado como presidente del organismo. La ingeniera agrónoma María Beatriz “Pilu” Giraudo, quien previamente se desempeñaba como vicepresidenta, fue designada Consejera Técnica con carácter “ad honorem”.

Las designaciones fueron confirmadas a través del Decreto 466/2025, que llevó las firmas del presidente Milei y del ministro de Economía, Luis Caputo. El texto estableció que Bronzovich asumió “con rango y jerarquía de secretario” a partir del 8 de julio de 2025, con dependencia directa de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía.

Los principales cambios en el INTA


La reorganización del INTA se basó en el argumento de que su estructura anterior era «sobredimensionada y opaca», y que el organismo había perdido su «rumbo estratégico», enfocándose en investigaciones «más de carácter sociológico que técnico».

Los principales cambios que se implementaron en el INTA fueron:

  • Pasó de ser un ente autárquico a un organismo desconcentrado sin autarquía ni estructura directiva tripartita.
  • Se designó al ingeniero agrónomo Nicolás Bronzovich como presidente del INTA, con rango y jerarquía de secretario.
  • La ingeniera agrónoma María Beatriz Giraudo Gaviglio fue nombrada consejera técnica del INTA con carácter “ad honorem”.
  • El organismo quedó bajo la órbita de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía.
  • Se eliminó la figura del director nacional (cargo que ocupaba Ariel Pereda) para ser reemplazada por un director ejecutivo o CEO.
  • El cambio buscó «acelerar los procesos de investigación ajustándolos a las demandas inmediatas del sector agropecuario».

El mismo decreto estableció que Giraudo ocuparía el cargo técnico por recomendación de la cartera agrícola, sin percepción de haberes. Además, se eliminó la figura del director nacional, que ocupaba Ariel Pereda, y se reemplazó por un director ejecutivo o CEO, con el objetivo de «acelerar los procesos de investigación ajustándolos a las demandas inmediatas del sector agropecuario».

La decisión fue anticipada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, junto al ministro de Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, y se formalizó con el decreto 462/2025, que aplicó las facultades otorgadas por la Ley de Bases. Esta medida no solo implicó una reorganización funcional, sino un cambio radical en la concepción del INTA: ya no sería un ente autárquico con conducción compartida entre el Estado, el sistema científico y los productores.

Desde el propio INTA se valoró que el trámite para las designaciones se haya resuelto con rapidez, lo que permitió mantener en funcionamiento los proyectos técnicos en curso. Sin embargo, especialistas, funcionarios provinciales y organizaciones del agro advirtieron sobre los impactos estructurales que tendría esta reforma.

«El decreto de Milei viene a destruir el INTA», sostuvo el ministro de Desarrollo Agrario de Buenos Aires


En diálogo con Perfil el ministro de Desarrollo Agrario bonaerense, Javier Rodríguez, fue uno de los primeros en cuestionar con dureza el rumbo adoptado por el Gobierno nacional. Declaró que «el decreto de Milei viene a destruir el INTA» y que era «un día triste para la ciencia y la tecnología».

Afirmó que el organismo ya atravesaba una etapa de debilitamiento por retiros voluntarios, jubilaciones sin reemplazo y desfinanciamiento.

Rodríguez remarcó que el INTA fue clave en el desarrollo de más de 800 variedades vegetales adaptadas a distintas regiones, un aporte que, aseguró, estaba en riesgo. Además, apuntó que el nuevo modelo rompía con uno de los pilares más democráticos del instituto: la conducción tripartita. Sentenció que «se busca el vaciamiento y destrucción de las capacidades del INTA».