La capacidad instalada se usa solamente al 64%

La recesión que atraviesa la economía nacional, arroja nuevos datos a diario. Esta vez fue el turno del informe sobre “Utilización de la capacidad instalada en la industria” que publica mensualmente el Indec.

El relavamiento indica que durante el último mes de octubre, el uso de la capacidad llegó apenas al 64%.

El dato de octubre es levemente mejor al de agosto y septiembre, cuando el uso de la capacidad llegó al 63% y al 61,1% respectivamente. Sin embargo, ello no cambia el hecho de que un tercio de las máquinas que estan disponibles en la economía argentina, se encuentran paradas. Una foto que comienza a preocupar a los funcionarios del área económica de cara al año 2019, por las implicancias en cuanto al empleo.

Al analizar los diferentes rubros de la industria nacional, la realidad de los diferentes sectores es por demás heterogénea. Existen actividades que muestran una buena dinámica en lo que va del año y que aun no reciben el impacto de la crisis económica. Otros en cambio, se encuantra prácticamente trabajando ‘a media máquina’.

Uno de los sectores más dinámicos es el de las industrias metálicas básicas que mantienen una utilización del de la capacidad del 83,9%. La siguen la refinación de petróleo, que trabaja al 78,8%, la industria del papel que lo hace al 76,5%, los minerales no metálicos al 73,7%, y el tabaco al 71,4%.

La industria alimenticia por su parte, mantiene una utilización del 66,6%, lo que a todas luces muestra las dificultades que genera el derrumbe del consumo familiar minorista, en el nivel de actividad productivo.

Entre los rubros más castigados en cambio, se ubican la edición e impresión, cuya ocupación es del 59,5%, el caucho y el plástico, que utiliza el 52,1% de su capacidad, la metalmecánica que trabaja al 49,2%, industria textil que lo hace al 47,4%, y la industria automotriz que solo lo hace al 45,9%. Este último es un caso emblemático por tratarse del rubro industrial que es más competitivo y que motoriza las exportaciones industriales argentinas. Se trata de un sector sumamente golpeado por el incremento de costos internos, lo que produce un freno de magnitud. Junto al sector textil, mantienen más de la mitad de su capacidad ociosa.

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