Se desploman las ventas de automóviles

Poco tiempo atrás, el barco insignia de la economía nacional, supo ser la industria automotriz. La crisis que atraviesa el país en 2018, revirtió drásticamente esa situación. Las ventas se desplomaron en octubre, y se acumulan los stock en terminales y concesionarias, afectando la producción en los próximos meses.

Así lo reflejan los datos dados a conocer por la Asociación de Fabricantes de Automotores (Adefa). Según la cámara empresaria que nuclea a las doce fábricas que trabajan en Argentina, las ventas de vehiculos livianos durante el mes de octubre, alcanzaron las 46.000 unidades. Representa una estrepitosa caída interanual del 40%. A ello se suma que la venta de planes de ahorro se derrumbó un 50% durante el mismo mes.

Los representantes del sector identifican tres causas para esta dinámica. El primero de ellos es la devaluación. El avance del tipo de cambio dio impulso al precio de los automóviles y contrajo la demanda. El segundo motivo, es que los sueldos no han acompañado esa dinámica de los precios, y quedaron retrasados. El último, es que las altas tasas de interés, complican la posibilidad de acceder al financiamiento.

Al proyectar los datos, se observa un horizonte gris. Estiman que este año las ventas alcanzarán las 760.000 unidades. Significaría una baja del 15% en relación a las 900.000 unidades patentadas el año pasado. En el acumulado anual, la brusca caída de octubre es amortiguada por los buenos datos registrados en el primer trimestre. Sin embargo, el punto es que los fabricantes esperan que el declive se acentúe en 2019. Los empresarios estiman que las ventas del año que viene serían de 620.000 unidades, otra baja cercana al 20% anual.

Los empresarios elevaron los datos al Ministerio de Producción, señalando el impacto extra que generan la quita de reembolsos a la exportación y las retenciones. Estiman que solo eso representa una pérdida de u$s 500 millones. Advirtieron además que si el escenario no cambia, comenzarán las suspensiones de personal. Aducen que el stock acumulado en concesionarias y terminales, es igual a cuatro meses de producción.

La delicada situación de la industria automotriz es un botón de muestra de la recesión que padece la mayoría de los sectores de la economía nacional.

Industria Pulso