Reabren los bancos en Uruguay mientras los sindicatos anuncian paro
La plaza operó con normalidad tras el arribo del crédito de U$S 1.500 millones. La protesta será contra el "corralito" para los plazos fijos en entidades oficiales.
Con la reanudación de la actividad bancaria en Uruguay, que generó largas colas frente a las entidades y cajeros, aunque no incidentes, el Banco Central de Uruguay (BCU) intentó ayer dar señales de transparencia en el mercado y decidió suspender por 90 días a la Cooperativa de Ahorro y Crédito (CAYCU) y sustituir a sus autoridades, que se sumó de esta manera a los ya suspendidos de Crédito, Comercial y Montevideo-Caja Obrera.
El presidente del Central uruguayo, Julio de Brum, evaluó como «normal» y «calma» la primera jornada de operaciones en la plaza financiera después del feriado y, aunque reconoció que hubo una «alta demanda» de depósitos en el estatal Banco República, aseguró que el nivel de retiros fue menor al que esperaban las autoridades de la institución.
De Brum expresó su confianza en que se afirme «una tendencia a la normalización» en todos los bancos y anticipó que en los próximos días se adoptarán las medidas necesarias para que «la semana próxima se normalice la cadena de pagos».
Mientras miles de ahorristas uruguayos, a los que se iban sumando los argentinos que viajaron ayer a Montevideo, padecían largas colas frente a bancos y cajeros, el secretariado ejecutivo de la central sindical única PIT-CNT propuso al máximo órgano de resolución gremial, la Mesa Representativa, la realización de una huelga general de 11 horas para mañana, contra la política económica del gobierno, convocatoria que era analizada esta noche.
El paro, de concretarse, dejaría otra vez inactivos los bancos, que además cerrarán el miércoles para dar lugar a una asamblea general del sindicato del sector (AEBU) con el fin de analizar un plan de acción contra la nueva ley de Estabilización del Sistema Bancario, aprobada el fin de semana, que establece un «corralito» por tres años para los plazos fijos en dólares de entidades estatales.
La convocatoria, y la consecuente inactividad bancaria, prometen tensar el ambiente que existía entre los depositantes que concurrieron a la Ciudad Vieja, centro financiero uruguayo, donde desde temprano se dispuso un fuerte operativo de seguridad, extendido a las zonas álgidas, donde la semana pasada se registraron saqueos, que incluyó guardias en el puerto y aeropuerto de Carrasco, lugares de desembarco de los argentinos.
El hasta hace poco tradicional apacible clima en la capital uruguaya estará enrarecido hoy además por la llegada del controvertido O»Neill, quien durante su breve escala de apenas una horas se entrevistará con el presidente Jorge Batlle para refirmarle el apoyo de Washinton ante la crisis que vive el país.
Además del crédito puente de 1.500 millones de dólares que Estados Unidos le transfirió ayer vía electrónica a Uruguay, en espera de ayuda de los organismos multilaterales, el Gobierno de George W. Bush propuso incrementar de 3.000 a 3.800 millones de dólares la financiación del FMI, del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Animado por el salvavidas estadounidense, el ministro de Economía, Alejandro Atchugarry, consideró que la ley de Estabilidad del Sistema Bancario pone «al país en el buen camino».
El mercado pareció reaccionar en ese sentido, ya que el riesgo país bajó ayer 5,49% y se ubicó en 2.478 puntos, mientras que la moneda nacional repuntó al cotizar a 26 pesos en relación al dólar.
Con esos valores, la depreciación de la moneda uruguaya en se ubicó en 37% desde que rige la libre flotación del tipo de cambio, el 20 de junio, y en 46 por ciento en lo que va del año.
En los siete primeros meses del año las reservas del BCU cayeron el 79,61%, y al 31 de julio contaban con 632 millones de dólares, mientras que dos días antes se ubicaban en 655 millones.
La pérdida de los activos de reserva en lo que va del año totaliza así 2.468 millones de dólares (-79,61%) con respecto a los 3.100 millones en que se ubicaban al 31 de diciembre de 2001, y pese a que a fines de junio le fueron inyectados 460 millones por parte del Fondo Monetario.
Análisis: EE. UU. admite que la crisis se agrava y cambia de estrategia
Estados Unidos hizo con Uruguay una excepción a su política de no ayudar a los países en problemas financieros con asistencia bilateral por el temor a un contagio mayor de la crisis argentina, dijeron analistas.
«El cambio de actitud del Gobierno estadounidense obedece a cierto temor a lo que pueda suceder en América Latina a raíz del contagio financiero», indicó Thomas Trebat, jefe para América Latina de Salomon Smith Barney
«La magnitud del dinero (prometido a Uruguay) es grande para un país tan chico», y se debe a que «los uruguayos han colaborado de forma impresionante con los pedidos del FMI y del Tesoro (…) y a que la situación económica en Uruguay se ha vuelto alarmante», señaló.
EE. UU. otorgó a Uruguay un crédito puente de 1.500 millones de dólares que el país devolverá posiblemente la semana próxima, cuando reciba un monto equivalente de los organismos multilaterales de crédito (que incluye 800 millones en dinero fresco).
Según el experto, el giro en la política estadounidense con respecto a Uruguay se debe en parte a la desaceleración del crecimiento en Estados Unidos. «Con la debilidad demostrada en la economía (estadounidense), el Tesoro no quiere correr riesgos innecesarios, como una explosión en Brasil con un posible impacto en la economía mundial», añadió.
El aumento de la ayuda a Uruguay refleja «la conciencia de que hay una crisis seria en la subregión», había indicado el presidente del BID, Enrique Iglesias.
Pero para Trebat, la política estadounidense sigue siendo «aislar el problema argentino», sobre todo por los problemas de liderazgo en ese país.
Arturo Porzecanski, director de mercados emergentes del ABN-Amro en Nueva York, estimó que el crédito puente concedido por Estados Unidos a Uruguay «es un hito histórico».
Es la primera vez que el Gobierno de George W. Bush recurre al Fondo de Estabilización Cambiario -de donde proviene el crédito puente- para ayudar a un país, recordó. Además, indicó, el anuncio cae como anillo al dedo al secretario del Tesoro, Paul O»Neill, de gira en la región.
«Uruguay le vino perfecto a O»Neill» porque «comparando con Brasil, es más barato» ayudarle, «y respecto de Argentina, es más justificado, porque tiene un buen gobierno, que no es transitorio, y es la víctima del contagio», dijo el economista.
Respaldo europeo
La Unión Europea expresó en Montevideo su apoyo a Uruguay ante la crisis económica y financiera de los últimos días, debido a que considera al país sudamericano como «un socio estratégico».
A través de un comunicado emitido en Montevideo, donde está la sede regional de la UE, explicó los por qué de la calificación de «socio estratégico». «Este calificativo obedece no solamente al liderazgo que ejerce en la defensa de nuestros valores comunes y en impulsar el proceso de integración regional, sino también por el valor de paradigma como país con instituciones y convicciones fuertes a favor de la democracia, de los derechos humanos y del libre comercio, como factores de estabilidad y equidad social», precisa .
Ya comienza a preocupar el peligro de otra recesión en Estados Unidos
NUEVA YORK (AFP/Reuters).- Los mercados bursátiles mundiales sufrieron una fuerte baja ayer , mientras que el tan temido escenario de una doble recesión en Estados Unidos gana terreno, con un índice norteamericano ISM en baja más importante de la prevista.
Al cierre de Wall Street, el DJIA cayó 3,24%, aproximándose a la barrera psicológica de los 8.000 puntos, por debajo de la cual no había caído desde el 24 de julio. El índice Nasdaq cayó 3,36% volviendo a sus niveles de fines de 1997
Wall Street borró en las tres últimas jornadas dos tercios de sus ganancias desde el 24 de julio. «Las novedades económicas son malas, no hay nada para sostener el mercado, entonces baja», constató Larry Wachtel, principal estratega de Prudential Securities.
El presidente estadounidense, George W. Bush, intentó sin éxito elevar la moral de los mercados , cuando afirmó nuevamente su confianza en la economía estadounidense durante un discurso pronunciado en Pittsburg (este).
«Soy optimista en lo que concierne a la economía. Los datos fundamentales son buenos, las tasas de interés son muy bajas y la política monetaria es coherente», declaró.
El escenario de la doble recesión significaría que EE.UU. entraría nuevamente en una período recesivo después del sufrido en 2001.
Por su parte, en su revisión anual de la economía más rica del mundo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ofreció una valoración en gran medida sombría de las perspectivas para el país. El FMI dijo que las caídas en los mercados de acciones, una serie de escándalos contables y un panorama incierto para las ganancias de las empresas han aumentado las posibilidades de que la recuperación económica de EE.UU. sea más débil de lo esperado.
Al preparar el informe, el FMI dijo que había pronosticado que la economía de Estados Unidos se expandiría en 2,5% en este año y en 3,25% en el 2003 después de una recesión moderada en 2.001. Sin embargo, datos recientemente divulgados y otros acontecimientos, como la caída en los precios de las acciones en las últimas semanas, han exacerbado los riesgos de debilidad tanto para el consumo personal como de la inversión empresarial.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios