De ladrón a policía: la vida de Eugene Vidocq, el primer detective de la historia

Eugene François Vidocq fue un detective y escritor, que vivió en Francia entre 1775 y 1857, y tiene una historia bastante particular. Fue el primer director de la ‘Seguridad Nacional’ y uno de los primeros investigadores privados, además fue un criminal reconvertido en policía que dejó escritas sus memorias que inspiraron a autores como Edgar Allan Poe y Arthur Conan Doyle. En eso estamos de RN Radio (90.9 en Neuquén y 105.7 en Roca) conoció su historia en la visita de Federico García Bravo, licenciado en Criminología y Ciencias Forenses, en su columna de los martes.

Eugène-Francois Vidocq fue un detective, y la persona que inspiró ‘El Conde de Montecristo’ y algunos relatos de Edgar Allan Poe. Comenzó siendo un criminal y estafador, uno de los más prolíficos de Francia. Incluso estuvo preso. Y a los 34 años decidió cambiar de vida.

Era un maestro del espionaje y del disfraz. Para pasarse a trabajar a la Policía se escapó luego de ser detenido y se presentó en el cuartel. Comenzó realizando tareas de espionaje para la Policía, que incluso fingió un escape de la cárcel para que trabaje de incógnito.

Todas sus operaciones eran de encubierto. Creo una división con ex convictos que conocían de los movimientos y demás. Fue el primer espía de la historia moderna. Fue el primero en utilizar el cotejo balístico. Se le atribuye ser el primero en usar la huella digital. Inventó el espionaje y los trabajos detectivescos. Fue un adelantado a su época.

Con el tiempo, y por algunas cuestiones políticas, Eugène dejó la Policía y creó la primera división de Detectives Privados. La leyenda de Eugène-Francois Vidocq fue creciendo con el boca en boca, y con la publicación de su autobiografía.

Escucha la columna de Federico García Bravo en «En eso estamos» de RN Radio

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