Reducen condena a Sebastián Cabello y quedó libre

BUENOS AIRES (Télam).- Sebastián Cabello, quien había sido condenado por el homicidio de una mujer y su hija al provocar un accidente cuando corría una picada en el barrio porteño de Núñez, recuperó ayer la libertad luego que un fallo redujo su condena de 12 a tres años de prisión, al considerar que no tuvo intención de matar, informaron fuentes judiciales.

La Sala III de la Cámara Nacional de Casación Penal modificó de esta manera lo que en 2003 había sido un fallo sin precedentes para los accidentes de tránsito en un caso que conmocionó al país y produjo una reforma legal que elevó el máximo de la pena de los homicidios culposos de tres a cinco años.

Cabello quedó en libertad a las 18.20 de ayer cuando su hermano lo pasó a buscar en un automóvil azul por el Escuadrón Buenos Aires de Gendarmería Nacional ubicado en la avenida Antártida Argentina, en el barrio porteño de Retiro, donde cumplía su condena desde 2003.

Si bien los camaristas Eduardo Rafael Riggi, Angela Ester Ledesma y Guillermo José Tragant consideraron que Cabello fue responsable por las muertes de Cecilia González Carman y Vanina Rosales, recalificaron el hecho como un «homicidio culposo» -sin intención-, y descartaron el «homicidio con dolo eventual», en el que el imputado debió representarse el daño que podía ocasionar.

El cónyuge y padre de las víctimas, Sergio Rosales, aseguró ayer que «la justicia no existe» y la madre y abuela, Sara González Carman, insultó a los jueces al considerarlos «unos hijos de una gran… ya saben qué» y acusarlos de haber recibido «coima».

El abogado querellante, Marcelo Parrilli, aseguró que estudiará el fallo y analizará si presenta un recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia, mientras que el defensor de Cabello, Alejandro Novak, dijo que «el caso no tiene vuelta atrás y siempre fue un homicidio culposo».

El 14 de noviembre d 2003, el Tribunal Oral Criminal 30 había condenado a Cabello por dolo eventual al considerar que el joven tuvo que haberse representado que podía matar al correr una picada a 137 kilómetros por hora por la avenida Cantilo con un auto preparado, y no hizo nada para evitarlo.

En aquella oportunidad, los jueces René Penelas, Silvia Mora y Oscar Garzón Funes aplicaron a Cabello una pena de 12 años de prisión. Sin embargo, en el fallo de ayer, la Sala III del máximo tribunal penal del país sostuvo: «En nuestro parecer, el imputado actuó con un alto grado de imprudencia, con extrema inobservancia de las normas que debía cumplir al mando de un rodado, pero descartamos que haya habido de su parte intención de dañarse a sí mismo o a terceros».

«No se advierte en qué elemento acreditativo han fincado los jueces su convencimiento acerca de que Cabello, al conducir su auto de la manera en que lo hiciera, había previamente aceptado que iba a embestir a otro auto, provocando la muerte de seres humanos y lograr salir él indemne», añade el texto.