Las Grutas: otra vez las cloacas en la mira

Un verano sin desbordes cloacales que bajen a la playa y muestren al turista la peor postal del balneario, tal como ocurrió en el inicio de la temporada anterior. Eso lo que exigen los vecinos que acudieron a la Justicia y la empresa Aguas Rionegrinas (ARSA) no puede garantizar, ya que “no podemos prever que los caños no se rompan”, explicaron.

Tras varios meses de audiencias y promesas, algunos vecinos participaron ayer como testigos de una inspección ocular en la planta elevadora de líquidos cloacales de Aguas Rionegrinas (ARSA), para verificar las acciones que la empresa estatal puso en marcha para tratar de evitar nuevos desbordes. Entre ellas:

– Colocaron grupos electrógenos permanentes en las estaciones elevadoras.

– Establecieron sistemas de monitoreo que avisan sobre fallas del sistema.

– El jefe de mantenimiento de la planta debe citar a su equipo si se eleva el nivel de líquidos que bombean a la estación elevadora.

De todos modos, el problema principal está en el subsuelo. La infraestructura no acompañó el crecimiento de la villa y las cañerías son viejas y no resisten mayor presión durante la temporada de verano.

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Juan Elizabe, subgerente de planta de ARSA, lo dejó en claro durante la inspección. “Lo que no se puede prever es el problema por las roturas de caños. Y en diciembre pasado (cuando se registró una de las fugas más importantes) eso fue lo que pasó. Y hasta que se repara, los vecinos en sus casas siguen tirando la cadena y el líquido sigue viniendo” graficó.

Interrogantes

El abogado de los frentistas que presentaron el amparo ambiental, Carlos Cajarville, dijo que la inspección de ayer dejó muchos interrogantes. “¿Por qué no se hizo antes este plan de emergencia que ellos dicen haber iniciado hace 60 días? Sostienen que este plan puede remediar la pérdida de fluidos a partir de ahora. Eso lo tenemos que ver”, indicó.

Los sucesivos desbordes originados en la estación elevadora generaron indignación en la villa el año pasado. Justo cuando arrancó la temporada. Olores fétidos y ríos de líquidos contaminados bajaron hacia el mar.

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“Ayer quedó bien claro algo que vimos todos: cuando hay roturas, los desbordes fluyen hacia el mar. Y eso es muy grave”, puntualizó Cajarville. Y destacó que “por lo menos ahora la comunidad tiene una herramienta judicial para discutir una cuestión que es cara a sus intereses. Y la firma deberá pagar fuertes multas si los derrames se producen nuevamente. En los próximos días será la jueza (Vanessa Kozaczuk, titular del Juzgado Civil N° 9 de San Antonio Oeste) la que deberá expedirse sobre el tema”, indicó el letrado.

Esta ‘movilización’ (forzada por la Justicia) fue reconocida por la propia empresa. “Fuimos generando (a través de los meses y las diferentes audiencias) muchas tareas. A saber: la instalación de grupos electrógenos, de sistemas de monitoreos que avisan acerca de una irregularidad. Y hay un plan de contingencia que cuando va ‘levantando’ el nivel de la estación elevadora, va citando gente para manejar el problema, en este caso el jefe de servicio o de mantenimiento” manifestó Elizabe.

Reconoció que “no existe un plan estratégico para el cambio de las viejas cañerías en los lugares críticos. Y explicó que la causa es porque la ciudad creció mucho y la infraestructura no fue acompañando. Y hay que tener en cuenta que donde antes había una casa ahora hay tres edificios. O sea, donde antes había 3 frentistas ahora hay 18 departamentos. Las Grutas es un sistema complejísimo por todo esto” consideró el experto.

Ante este panorama, hasta que las obras de ampliación y recambio de redes previstas dentro del programa que financiará la Provincia no se culminen, el riesgo de que las cañerías colapsen seguirá latente. Y esas acciones, que aún no comenzaron, demandarán un plazo de ejecución de al menos 2 años.

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Desde ARSA reconocieron que no existe un plan estratégico para el cambio de las viejas cañerías en los lugares críticos de la ciudad.

Cronología de la contaminación

25/12/2017. Cerca de la estación elevadora que deriva líquidos negros hacia la planta depuradora para su posterior tratamiento, se produjo un enorme derrame que bajó hacia el mar.

Indignación. El episodio generó indignación porque fue el cuarto inconveniente que provocó que líquidos sin tratar desembocaran en la costa –en diciembre de ese año–.

23/12/2017. Dos días antes del derrame, el gobierno provincial había refutado un informe técnico de expertos locales que advertía contaminación bacteriana en las principales bajadas céntricas del balneario. Lo atribuyeron al funcionamiento deficiente del sistema y de la planta depuradora de residuos cloacales.

Relocalizarán y ampliarán la planta de tratamiento

La obra de relocalización y ampliación de la planta de tratamiento de residuos cloacales comenzó con la construcción de un obrador.

El espacio está ubicado cerca del acceso norte a esta villa .

La iniciativa incluye un “paquete” de construcciones anexas a esa ampliación. Como el cambio de las colectoras troncales, la construcción de cinco nuevas estaciones elevadoras y la recuperación y modernización de las existentes. Además, contempla una impulsión troncal de 900 mm de diámetro y 3000 metros de longitud hacia la nueva ubicación de la estación elevadora.

Posee un presupuesto oficial de $230.551.863 que se financiarán con fondos provenientes del Plan Castello. Su ejecución prevé dar respuesta al desarrollo y crecimiento poblacional que pueda experimentar la zona hasta el año 2037. Es decir, un lapso de 20 años.

El plazo de ejecución de las tareas está previsto en 18 meses. Se estipula que en plena temporada estival estas obras darán respuesta a la demanda de 90.000 personas. Y prevén el “vuelco cero” de los efluentes, que serán reutilizados para riego en distintos emprendimientos productivos.

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