Salto dice que habrá cesación de pagos; para la comuna hay superávit

CIPOLLETTI (AC).- El concejal y jefe del MPP, Julio Salto, advirtió ayer que la municipalidad de Cipolletti «va hacia una segura cesación de pagos» si no se toman medidas urgentes de reducción del gasto y mejora de la recaudación.

Para el gobierno de la ciudad, las cosas son muy distintas porque se afirma que, confrontados los gastos y los recursos corrientes, el primer semestre cerró con un superávit operativo del 8%.

«El crecimiento del gasto de los últimos tiempos no obedece a ninguna justificación lógica y la respuesta sólo debemos encontrarla en la idea de un Estado que subsidia la actividad política del intendente de turno», escribió Salto en un documento.

El concejal expresó que «el gasto de la clase política de la intendencia (el Concejo gasta hoy 200.000 pesos menos por año) ha aumentado de 1.150.000 a 1.350.000 pesos, y la partida de contratados, de 1.200.000 a 1.850.000 pesos anuales». «En el mismo período -añadió- han disminuido la inversión en obra pública y en asistencia social de manera alarmante».

Para Salto, esto obedece a un síndrome denominado «ya nos vamos» (el mandato del intendente Julio Arriaga, que se inició en 1997, vence en diciembre de 2003).

«El evidente que el lanzamiento del intendente a la arena política provincial y la lucha por la sucesión -a modo de botín- desatada en el gabinete hacen que cada secretario tenga autonomía para hacer lo que quiera», cuestionó el concejal.

Pero el secretario de Gobierno de la comuna, Fabián Gatti, refutó las críticas que viene haciendo Salto.

Explicó que la partida de personal, al cabo de los primeros seis meses del año, se subejecutó (49%). El funcionario admitió la posibilidad de que la planta de empleados haya crecido en junio o julio, pero aclaró que ello fue corregido.

En los datos globales de ejecución del presupuesto -que aún no fue aprobado por el Concejo- las partidas fueron ejecutadas en un 54%, pero en este número -aclaró Gatti- quedó englobada la amortización de la inmensa mayoría de la deuda que se arrastra desde el año pasado.

De la comparación del primer semestre de este año con el del año pasado, surge que los gastos bajaron de 7,4 millón a 6,8, mientras que los recursos se mantiene más o menos en el mismo nivel.