Se cohesiona en el PJ la oposición a Costanzo

Las estimaciones más optimistas dicen que sucederá antes de fin de mes.

Otras, en cambio, que será ya corriendo junio.

Lo concreto es que en semanas más surgirá un nuevo polo de poder dentro del PJ rionegrino que, en los hechos, será opositor a la línea que lidera el senador Remo Costanzo.

Tan avanzado está el proyecto, que incluso ya se barajan nombres para la identificación del sector: entre otros figura el Movimiento de Recuperación Peronista.

La iniciativa fue confirmada a este diario por tres de los dirigentes del sector: los diputados nacionales Miguel Pichetto, Ovidio Zúñiga y Carlos Soria.

A este trío están sumados -entre otros- la ex intendenta de Bariloche, María Costa, el secretario de Ciencia y Técnica de la Nación Juan Carlos Del Bello y el rector de la Universidad Nacional del Comahue Pablo Bohoslavsky.

El proyecto apunta a poner en marcha lo que Pichetto definió como «un proceso de síntesis y renovación del peronismo que mediante un intenso debate de sus cuadros, cohesione al partido para sustituir definitivamente a una conducción ligada al personalismo y el fracaso».

En otros términos: enfrentar a Remo Costanzo y sus planes políticos, que en lo inmediato pasan por ser reelegido para el Senado en el 2001, pero no se descarta que se prolonguen hacia una cuarta candidatura a gobernador de la provincia en el 2003.

Como se sabe, Costanzo fue tres veces candidato a ese cargo. Pero perdió en todas.

Este diario pudo acceder a reflexiones que, contenidas en borradores que seguramente servirán de base a una futura decla- ración del sector, señalan que «a lo largo de una transición signada por sucesivas derrotas, el peronismo debe construirse una nueva estética social. De ahí el fundamento de sustituir la imagen de Costanzo, imposibilitada definitivamente de insertar al partido en la sociedad más allá de los niveles de fracaso ya logrados».

Siguiendo esa línea de razonamiento, una de las reflexiones reconoce con mayúsculas que «no se trata de que el compañero Costanzo sea un mal dirigente, sino que con él hegemonizando el partido y como candidato, el partido no tiene futuro electoral».

Consultado ayer Pichetto sobre este tema, surgió un verbo más elocuente para referirse al eventual rol a jugar por Costanzo en los próximos escenarios electorales:

-Yo reconozco muchos méritos en Remo. He trabajado junto a él y juntos hemos buscado destinos políticos. Pero hoy, ante la cadena de fracasos que sobrellevamos, apoyar a Remo y sus designios políticos es lisa y llanamente ir contra la naturaleza de las cosas, marchar contra el sentido común -precisó el dirigente.

En coincidencia con esa perspectiva, una de las reflexiones contenidas en los mencionados apuntes destaca que «no se trata de echar a nadie por la ventana, una tentación que siempre asoló al peronismo y que todos los compañeros saben cuánto costó al partido en pasados no muy lejanos. Pero sí se trata de que los compañeros comprendan que para que el peronismo reconstruya los puentes con la sociedad rionegrina, es imprescindible la sustitución de Costanzo».

En los apuntes antes mencionados se encuentran además varias carillas destinadas a analizar el rol opositor que en la política rionegrina le cabe al PJ, «pero que no cumple».

Se indica entonces que «la influencia que a lo largo de años tuvo sobre los destinos del partido el personalismo, lo obligó a acomodar su rol opositor a los intereses electorales de esos designios personales».

«Fue entonces que nos convertimos en más o menos opositores según la cercanía o no de las elecciones. Así, en las campañas nos endurecíamos con el gobierno radical. Luego -tras la derrota- el silencio o sólo una oposición coyuntural, contestataria, sostenida en denuncias aisladas y muchas veces instrumentadas vía la voluntad individual de tal o cual dirigente».

En ese tono, los apuntes destacan que ha llegado el momento de que los «peronistas comprendamos que para ser creíble, la tarea opositora debe sustentarse en control de la gestión de gobierno y una continuidad de acción que se funde en aportes y propuestas concretas de solución de problemas».