Conectan las plantas reguladoras de presión del gasoducto de la Región Sur

Se trabaja en las plantas de Ramos Mexía y Sierra Colorada. El objetivo es habilitar el gasoducto en enero de 2023

Operarios y maquinarias de la empresa Rimsol comenzaron a realizar distintos trabajos para conectar las plantas reguladoras de presión a los sistemas de abastecimiento de gas que tienen varias localidades de la Región Sur, con el objetivo de podar habilitar esta mega obra en enero de 2023.

El gasoducto de la Región Sur se construye en el marco del Plan Castello con una millonaria inversión. Tiene 365 kilómetros de extensión, entre el gasoducto San Martín, en cercanías de la ruta nacional 3, y Maquinchao. La obra se realizó en cuatro tramos para poder dotar de gas natural a más de 17.000 habitantes distribuidos en ocho poblaciones ubicadas a la vera de la ruta nacional 23.

En cuatro de ellas, Ramos Mexía, Sierra Colorada, Los Menucos y Maquinchao, desde mediados de 1990 funcionan plantas vaporizadoras de gas propano que abastecen a los vecinos.

El soterramiento de los caños del gasoducto quedó terminado hace varios meses y también quedaron conectadas las plantas reguladoras de Los Menucos y Maquinchao.

Los trabajos incluye la extensión de la cañería y el paso por debajo de la ruta nacional 23. Foto: Héctor Fuentalba.

“De las cuatro localidades dos ya están conectadas: Maquinchao y Los Menucos. Actualmente se realizan los trabajos para conectar la planta de Ramos Mexía y la de Sierra Colorada. Hay que cruzar la cañería por debajo de la ruta nacional 23 y llegar, de la nueva planta reguladora de presión hasta el sistema que actualmente abastece a estas poblaciones. La empresa viene realizando los trabajos muy bien. El plazo de obra es de seis meses” señaló el ministro de Obras y Servicios Públicos de la provincia, arquitecto Carlos Valeri.

En cada localidad se construyó una plantas reguladoras de presión. Foto: Héctor Fuentealba.

Valerí detalló que durante los últimos meses, técnicos de Coopetel realizar un relevamiento en cada uno de los hogares de las cuatro localidades, donde funcionan las plantas vaporizadoras, para constatar el estado de las instalaciones domiciliarias y funcionamiento de los artefactos.

“Relevaron el 90% de los hogares. Son alrededor de 2.800”. Adelantó que el objetivo es poner en funcionamiento del gasoducto en enero de 2023. “Necesitamos que haga calor porque la gente que hoy tiene gas en estas cuatro localidades se va a quedar sin servicio uno o dos días. Hay que vaciar las cañerías de gas propano para poner inyectar el nuevo gas”.

Los trabajos que se realizan en Ramos Mexía, inyectaron optimismo y satisfacción en los pobladores y autoridades de los pueblos. “Es el último paso para que podamos tener gas natural. Es una obra muy necesaria para nuestra región, donde el tiempo castiga con gran rigor en invierno. Para nosotros es un sueño saber que en poco tiempo más vamos a disfrutar de este servicio que cambiará la vida de nuestra región. Además del bienestar, no tengo dudas que abrirá puertas para la llegada de inversiones” señaló el intendente de Ramos Mexía, Nelson Quinteros.

En esta localidad solamente el 40% de la población tiene gas de red. Actualmente se ejecuta la ampliación de las cañerías poder llegar al 80% de los hogares con este vital servicio.


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