Abre en Viedma el refugio para personas en situación de calle
Está ubicado en el predio del InstitutoPaulo VI y funciona bajo la órbita del municipio local. Es un lugar de pernote donde las personas, además de dormir, recibirán la cena y el desayuno.
La capacidad del lugar es para 10 personas. Fotos: Marcelo Ochoa.
A partir de este miércoles está habilitado en la capital provincial el hogar refugio para personas en situación de calle surgido a partir de un convenio de colaboración entre los gobiernos provincial y municipal y el Obispado local.
Es un lugar de pernote para varones, con una capacidad máxima de diez plazas, donde los asistentes, además de pasar la noche, podrán utilizar los baños y recibirán la cena y el desayuno del día siguiente. El lugar, ubicado en el predio del Instituto Paulo VI, fue cedido por la diócesis, refaccionado por la provincia y quedó bajo la responsabilidad del municipio.
En mayo fue presentado en sociedad por la gobernadora Arabela Carreras y el intendente Pedro Pesatti, pero su puesta en funcionamiento se demoró bastante. En esa oportunidad el jefe comunal propuso que fuera denominado «Mario Cabrera», en reconocimiento a un vecino que siempre acompañó a las personas en situación de calle.
«Es un dispositivo complejo, por la organización, el equipamiento que tuvimos que hacer y, después, la capacitación del recurso humano» reconoció Mario Sánchez, secretario de Desarrollo e Integración Social del municipio capitalino.
El funcionario señaló que con las 10 plazas previstas »tendríamos que andar bien» pero «dependerá de muchas circunstancias» porque «hay muchos trabajadores golondrinas que no siempre están en situación de calle».
La habilitación del lugar es partir de las 18 y quienes asistan podrán «pasar la noche, comer ducharse e irse a las 8 después del desayuno» dijo Sánchez y contó que trabajarán en el lugar seis operadores puestos por la provincia y uno por el municipio.
La concreción se logró a partir de un convenio de cooperación firmado entre el gobierno de la provincia, la comuna local y elObispado de Viedma.
Si bien el lugar está destinado a dar cobijo a quienes no tienen donde vivir, en especial en invierno debido a las bajas temperaturas, la idea es que continúe en funcionamiento durante el resto del año con otras actividades como podría ser la capacitación en oficios.
Cuando surgió esta iniciativa se explicó que «el objetivo de acompañar a personas en situación de calle y que no han podido organizar un proyecto de vida que les permita cubrir sus necesidades vitales».
El personal que cumple tareas en el lugar recibió una capacitación denominada «Principios y Fundamentos del abordaje para la asistencia de personas en situación de calle. Una introducción a la práctica», a cargo del Ministerio de Desarrollo Humano y Articulación Solidaria, a través de la Secretaría de Acompañamiento y Protección Social, en articulación con el Municipio y avalado por el IPAP.
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