Un rincón escondido de Neuquén que no te podés perder: la última balsa de la provincia a un paso de la Ruta 40

Está a 50 kilómetros de Chos Malal y es uno de los lugares más elegidos por los turistas para su travesía. Se trata de la balsa Huitrín. Conocé los detalles.

Por Ruta 40 hay un rincón histórico escondido en el norte de Neuquén que es inédito en la provincia. Se trata de la balsa Huitrín ubicada a 50 kilómetros de Chos Malal y es la última que queda. «Sólo habita en el lugar un puñado de crianceros para los cuales la balsa manual, a tracción, es el único medio para cruzar el río Neuquén», detalló el Gobierno provincial.

Un lugar lleno de memorias que funciona para que los visitantes y lugareños puedan cruzar hacia la Ruta 9 a través del río. «Vestigio de una historia que tuvo su apogeo a mediados del siglo pasado, cuando la extracción del carbón estaba en auge», así lo describe el organismo.

Foto: Neuquén Informa.

«La explosión en la mina San Eduardo hace 74 años y el traslado de la traza nacional hasta su actual emplazamiento, varios kilómetros al oeste, motivó el éxodo masivo», resaltó. Este recóndito lugar que registra cálidas postales llama la atención de los turistas, quienes lo visitan para viajar los 75 metros de una margen a otro del río, ya sea en motocicleta o vehículos particulares.


¿Cómo funciona la histórica balsa ubicada en cercanías de Chos Malal?


Desde el Gobierno provincial explicaron que actualmente funciona de 8 a 12 y de 14 a 18 ya que suelen cambiar de horario en invierno. «La operación está a cargo de tres operarios contratados por la empresa que presta el servicio, mientras que el mantenimiento corre por cuenta del distrito 3 de la Dirección Provincial de Vialidad», indicaron.

Asimismo reafirmaron que «la tranquilidad del lugar sólo se ve alterada por el cruce de la embarcación, que demanda aproximadamente 10 o 15 minutos y funciona todo el año para garantizar que los pobladores accedan a la salud, realicen trámites o compras en localidades como Chos Malal o Buta Ranquil».

A su vez, explicaron que aunque el flujo vehicular sea acotado fuera de la temporada estival, los balseros cumplen un rol fundamental todo el año para los pobladores del sector.


Testimonios de operarios de la balsa Huitrín


Desde el organismo compartieron un testimonio que habla sobre este histórico rincón de Neuquén. Se trata de Miguel Ulloa quien es uno de esos operarios dentro de la balsa.

«Trabaja hace 9 años, pero conoce el lugar desde hace cuatro décadas: la familia de su esposa tiene un puesto frente al río. Reside en Chos Malal pero tiene un diagrama de 10 por 5 que lo mantiene varios días lejos de su casa. No se imagina cómo será su vida cuando ya no se dedique a esto», detallaron.

Agregaron: «Le gusta la tranquilidad del lugar, los paisajes -según él, de los más bonitos de Neuquén- y el cielo en las noches: sin luces que contaminen la visual, es como un mar de estrellas».

A su vez, explicó que muchos turistas provienen de otras provincias y visitan Neuquén por sus destinos cordilleranos, pero «el desvío en la ruta provincial 9 los tienta, porque en ciertos casos les permite ahorrar kilómetros, y deciden experimentar el cruce en barca«.