Antonio Colicheo ya está en Roca para ser juzgado por el femicidio de Claudia Casmuz
Un jurado popular será seleccionado el lunes próximo antes de que inicie el maratónico juicio, que tendrá más de 60 testigos. El convicto fue trasladado de Viedma a Roca y está alojado en una comisaría.
Antonio Colicheo, el asesino de Javier Videla, será juzgado por femicidio desde el martes 13 de septiembre. Foto: archivo (Juan Thomes)
Antonio Colicheo, único imputado por el femicidio de Claudia Casmuz (28) y condenado a 24 años de prisión por el crimen de Javier Videla, ya se encuentra en Roca a pocos días de ser juzgado por un tribunal popular.
El esperado juicio por jurados empezará el martes 13 de septiembre y se prolongará hasta el miércoles 20 del mismo mes con audiencias casi todos los días. Serán siete jornadas de larga duración, de 8:30 a 14:30 horas, incluido el día sábado en la Ciudad Judicial de Roca.
Pasarán a declarar más de 60 personas entre testigos de la parte acusadora y la defensa, que tendrá 16 en total. El juicio comenzará el martes con los alegatos de apertura de las partes y finalizará el miércoles 20 con los alegatos de clausura. Días después se conocerá la sentencia.
La joven de Roca, asesinada a golpes y con dos disparos en marzo de 2020, por fin tendrá su veredicto a un año y seis meses del hecho ocurrido en la ciudad. Colicheo fue trasladado desde el Penal I de Viedma a una comisaría de la ciudad, donde aguarda el inicio del juicio en el que se lo verá por primera vez sentado en el banquillo de acusados, luego del debate oral por el empleado judicial, donde participó de manera remota.
Según pudo saber RIO NEGRO, ahora está alojado en los calabozos de una comisaría en la zona noreste de la ciudad, ya que su defensa solicitó que no sea trasladado al Establecimiento de Ejecución Penal N° 2 para resguardar su seguridad.
El próximo lunes 12 de septiembre se elegirán las doce personas que ocuparán el lugar de jurados populares en este juicio, entre las 90 ya sorteadas.
Por el femicidio de Casmuz, Colicheo podría afrontar prisión perpetua, al tratarse de un homicidio doblemente agravado. La causa se había encaminado hacia un “juicio por jurados” ya que el hecho, la calificación legal, y por consiguiente la pena, sería superior a los doce años de prisión, en este caso cadena perpetua.
Se juzgarán dos delitos: «Homicidio doblemente agravado por haber actuado con alevosía y por haber sido cometido por un hombre contra una mujer en el marco de violencia de género (femicidio) mediante el empleo de arma de fuego, en concurso real con tenencia de arma de fuego de guerra” y por otro lado, un “robo simple en calidad de autor en concurso real con portación de arma de fuego de guerra”.
Este será el segundo juicio por jurados en la Segunda Circunscripción Judicial de Río Negro. El primero fue por el caso Nahiara, la niña de tres años del paraje Las Mochas en la Línea Sur.
Con reglas de conducta
Cabe recordar que Antonio Colicheo tiene restringido el uso del celular en el penal I de Viedma, donde estaba alojado, luego de que salieran a la luz amenazas por Facebook. En una audiencia el 5 de agosto, el juez Emilio Stadler prohibió el uso de redes sociales al imputado para proteger a los testigos y futuros jurados populares.
El caso
Claudia había sido violentamente asesinada y su cuerpo fue hallado a 75 kilómetros de Roca. Según se comprobó, la joven de 29 años fue ultimada de dos disparos, uno en la cabeza y en el hombro, casi en simultáneo con la desaparición del trabajador judicial Javier Videla. Su cuerpo fue encontrado el 4 de marzo del año pasado en el campo La Perseverancia, donde Colicheo se desempeñaba como puestero.
El asesinato ocurrió entre el 18 de febrero y 3 de marzo del año pasado, según se determinó en la autopsia. Según la acusación fiscal, el imputado se aprovechó del estado de vulnerabilidad de la mujer, que estaba en situación de calle y con alteraciones psicológicas. En esas circunstancias la trasladó al lugar y le disparó con un arma 9 milímetros en el hombro. Luego la golpeó con un objeto contundente en la cara y finalmente, la ultimó con un disparo en la zona parietal.
«Cavó una tumba en donde quedó tendido el cuerpo y le dio sepultura. Lo ocultó con ramas de jarilla», se detalló en la acusación fiscal de Andrés Nelli.
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