Noventa mil pesos para mantener el sector habilitado

NEUQUÉN (AN).- Más allá de los retrasos en la urbanización, bastó con que se habilitaran las veredas para que los neuquinos adoptaran como propia la isla. Es que frente a los edificios que faltan, el sector público, con plazas y un paseo para caminar junto a la compañía del río, convoca a un promedio de 6.000 personas por día cuando el buen tiempo lo permite. Para sostener el sector habilitado, Cordineu destina cerca de 90.000 pesos mensuales. Paga sólo dos sueldos, por 14.000 pesos en total, ya que la mayoría de los empleados están a cargo de la municipalidad y del gobierno provincial. El resto se va en el mantenimiento y la seguridad: sólo en adicionales policiales se gasta un mínimo de 30.000 pesos por mes. La ordenanza 8.976 dio forma legal al acuerdo que el 12 de diciembre de 2000 firmaron Sobisch y Quiroga. En el articulado quedó determinado que la provincia aportaría 4.200.000 de pesos (dólares, por el uno a uno) y la municipalidad las tierras de la isla 132, valuadas en ese monto. También se indicó el sistema para, con el 25% que debían ceder los dueños de las tierras a lotear, pagar la infraestructura necesaria. Una década después, no sólo hay retrasos en el ritmo de los loteos, sino que muchos de los propietarios se han negado a participar del negocio.


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