ser definitorio

El año pasado no comenzó del todo bien para Franco Balboa. Si bien en enero ganó la Regata del río Negro junto a su hermano Dardo, en la cuarta etapa de la pasada edición dio positivo en el control antidoping y fue además, acusado de malos comportamientos en el río por alguno de sus pares. De todas maneras, lo peor vendría después.

Durante el selectivo desarrollado en Viedma para ir al Mundial de Portugal, el neuquino fue suspendido un año por conducta antideportiva. La pena la efectivizó la Federación Argentina de Canoas (FAC) un mes después.

Hoy, Franco está detrás de un sueño y tacha los días que le faltan para volver al remar. En sus ojos se ve la furia contenida de alguien que quiere que el 2019 sea su año. “Me estoy preparando para distancias mucho más cortas, de velocidad. Estoy enfocado en un objetivo que es poder estar en el equipo argentino y una vez ahí, intentar conseguir una de las plazas para estar en los próximos Juegos Olímpicos. Esa es la gran meta que tengo por delante”.

P- ¿Te costó asimilar la sanción?

R- No, para nada. Yo sé que esta decisión fue de tres personas que no me quieren hace tiempo y son los que manejan la lapicera. Esas personas no van a influir en mis pensamientos ni en mis sentimientos a la hora de encarar este deporte, porque mi vida es el canotaje. No fue bueno estar alejado de la competencia, pero lo cierto es que nunca me alejé de la disciplina. Todo esto me va a servir para encarar con muchas más fuerzas el 2019, y demostrarme a mí mismo y a toda la gente que me acompaña, que mi potencial no se acaba con haber sido campeón del mundo en 2017.

P- Hay dos versiones de Franco Balboa. Una: que en el agua sos quizás el mejor; la otra: que dentro de ella no competís con buenas armas. ¿Qué tenés para decirle a esa gente?

R- Tengo para decirles que he estado en tres campeonatos del mundo, que están filmados desde la largada hasta la llegada y que en ninguno de esos tres campeonatos tuve ni sanciones ni llamados de atención. Fui campeón del mundo con jueces internacionales observándome, los cuáles están capacitados para este tipo de torneo. Además, en todos me hicieron controles antidoping y en ninguno tuve problemas. Puede ser que mi comportamiento en la última Regata no haya sido el mejor, pero aquí nadie es ejemplo de nada para venir a criticarme.

P- El año pasado, al final de la quinta etapa en Sauce Blanco me dijiste que la Regata del río Negro no la corrías más. ¿Seguís en esa postura?

R- Voy a volver a correrla. El año pasado estaba muy enojado. Se hablaron muchas cosas feas y ese fue un momento de mucha rabia, de mucha bronca. Tengo 24 años y toda una carrera por delante, y sé que tengo que aprender y mejorar un montón de cosas. Lo primordial es mantener mi humildad y no creérmela más de lo que soy.

P- ¿Le diste algún consejo a Dardo antes de largar?

R- No, sólo me pone muy contento que mi hermano esté hoy en este nivel. Es el actual campeón defensor y hace tres años era una persona que estaba fuera del canotaje. Hoy su vida está ciento por ciento metida en el deporte y eso me pone muy feliz.

“El único consejo que le di a Dardo y a Mario [Rosas] es que el río tiene muchas vueltas
y todo se puede revertir. Hay que luchar hasta el final”.

Franco habló sobre el bote neuquino que lucha entre los primeros en esta Regata.

La quinta etapa de la Regata Internacional del río Negro, sin dudas será el parcial que quiebre la paridad general, que tiene a los cinco botes de punta encerrados en un puñado de segundos.

La de hoy será la única etapa contrarreloj de la prueba y cómo se viene dando la competencia, puede ser clave para el lote de arriba, ya que serán únicamente los K-2 senior y los K1 senior lo que largarán bajo esa modalidad. El orden de largada se tomará de la clasificación general, partiendo en primer lugar quien encabece tal listado. Largarán cada 20 segundos de partida detenida, tal como es habitual en la competencia.

El quinto parcial se iniciará a partir de las 13 en el campo de De Rege y finalizará en La Balsa del Sauce Blanco (Guardia Mitre). LLevará el nombre de Jesús ‘Coco’ Coronel, el experimentado balizador de la prueba.