Fake News sobre el cierre de la Garganta del Diablo: la maravilla sigue rugiendo
El circuito más emblemático del Parque Nacional Iguazú permanece abierto y funcionando con normalidad. Las autoridades desmintieron cualquier cierre y llamaron a informarse solo por canales oficiales.
Por unas horas, el rumor corrió más rápido que el agua. En redes sociales y medios de todo el país, comenzó a circular una noticia: que la Garganta del Diablo, el salto más impactante del Parque Nacional Iguazú, estaba cerrada por una crecida del río. El supuesto cierre generó inquietud, consultas masivas, y algunas cancelaciones apresuradas. Pero nada de eso era cierto.
La desmentida no tardó en llegar. Fue clara, firme y oportuna. “El circuito está operativo y se desarrolla con total normalidad”, informaron desde la Intendencia del Parque y la empresa concesionaria Iguazú Argentina S.A. El río, imponente como siempre, sigue su curso. Y la Garganta, también.
José María Arrúa, el Ministro de Turismo de la Provincia de Misiones porteó un video ayer y anunció «Es Fake News absoluta con un video de 2014 del lado brasileño». Y agregó: «Así están este viernes 6 de junio las Cataratas del Iguazú. Imponentes y mágicas como siempre, con su caudal habitual. ¡Los esperamos a todos para que las disfruten!».
COMPLETAMENTE FALSO.
— José María Arrúa (@arruajm) June 6, 2025
Así están este viernes 6 de junio las Cataratas del Iguazú.
Imponentes y mágicas como siempre, con su caudal habitual.
¡Los esperamos a todos para que las disfruten!
PD: Fake News absoluta con un video de 2014 del lado brasileño. @C5N @todonoticias https://t.co/6mnh1QdB5O pic.twitter.com/qUJNoMjjtv
Para quien llega a Puerto Iguazú, ese salto que se traga al mundo entero es mucho más que una postal, es un momento inolvidable. El cruce del tren ecológico, la caminata sobre las pasarelas elevadas, el rugido que crece mientras uno se acerca al abismo. Y luego, esa imagen que no se olvida: millones de litros cayendo por una herida perfecta en la Tierra.
Por eso la confusión dolió. Porque cuando se habla de cerrar la Garganta, no es solo un cierre físico, es una interrupción simbólica, emocional. Se trata del corazón del parque, el que late con fuerza desde hace siglos y atrae a miles de visitantes por semana.
Las autoridades fueron más allá de la desmentida puntual. Reforzaron algo clave: la necesidad de informarse solo por canales oficiales. “Ante versiones no verificadas, siempre consultar fuentes confiables”, insistieron. Porque los daños de una noticia falsa no son menores: operan sobre el deseo, sobre el plan, sobre la economía del turismo local. Y sobre algo más delicado aún: la experiencia del viajero.
Hoy, los principales circuitos del área Cataratas, Garganta del Diablo, superior, inferior y sendero Verde, están habilitados y en óptimas condiciones. Técnicos del parque monitorean de forma constante el caudal del río y las condiciones meteorológicas. No hay alerta, ni riesgo, ni razón para preocuparse.
Desde Iguazú Argentina, la empresa que gestiona servicios dentro del área protegida, también salieron a llevar calma. Confirmaron que se refuerza el trabajo con operadores turísticos para evitar nuevas confusiones. El objetivo: que el visitante llegue informado, sin sobresaltos y con la certeza de que vivirá una de las experiencias más potentes que ofrece la naturaleza en Argentina.
Quienes llegan esta semana al parque lo comprueban: las pasarelas vibran bajo los pies, el vapor del salto se mezcla con el sol misionero, y los pájaros sobrevuelan el vacío como si lo custodiaran.
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