Dólar Futuro: la Corte ratificó a todos los jueces que recusó CFK

La causa quedó técnicamente con el camino despejado para pasar a la etapa de debate oral y público.

La Corte Suprema de Justicia ratificó a todos los jueces que dispusieron el procesamiento de la ex presidenta Cristina Fernández en la causa conocida como “dólar futuro”.

El máximo tribunal confirmó así todo lo actuado por el juez federal Claudio Bonadio y por los integrantes de la Sala II de la Cámara Martín Irurzun y Eduardo Farah, a quienes la ex mandataria había recusado por el supuesto de “enemistad” en su contra.

La ex presidenta y otros imputados, entre ellos el ex ministro de Economía Axel Kicillof y el ex titular del Banco Central Alejandro Vanoli, objetaron en primera instancia la actuación de Bonadio, cuya imparcialidad pusieron en duda a raíz de una supuesta “enemistad manifiesta”.

Luego fueron recusados los jueces de Cámara por no haber apartado a Bonadio.

El caso llegó hasta la Corte Suprema, pero la máxima instancia del Poder Judicial consideró que no le correspondía intervenir porque las decisiones objetadas no constituyen “una sentencia definitiva ni equiparable a tal”.

Los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton, Juan Carlos Maqueda, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz entendieron que las apelaciones de la ex presidenta no se dirigen contra un fallo que “ponga fin” a la causa o que cause un “gravamen de imposible reparación ulterior”, se informó oficialmente.

De tal manera, y al fracasar los recursos interpuestos por el abogado de la ex mandataria, Carlos Beraldi, la causa “dólar futuro” quedó técnicamente con el camino despejado para pasar a la etapa de debate oral y público.

Bonadio procesó a Cristina Fernández por “defraudación a la administración pública” a raíz de las operaciones de venta de dólar a futuro pautadas sobre el final de su gobierno.

El juez consideró que la ex presidenta, su ex ministro de Economía y el titular del BCRA actuaron a sabiendas de que el precio fijado para la moneda estadounidense a futuro no era el que marcaba el “mercado” de divisas.