Dolor e impotencia: anunciaron la “etapa crítica” por el fin del oxígeno

El vocero de la Armada dijo que el submarino tiene oxigeno para siete días sumergido, que se cumplirán hoy. No hubo novedades con los barridos marinos.

El día se consume como un fósforo en la base naval marplatense, donde permanecen los familiares de los 44 tripulantes del submarino desparecido el miércoles. Anoche cerraron con otro mensaje duro: El vocero de la Armada, Enrique Balbi, reconoció que la búsqueda está “entrando de a poco en una etapa crítica”, principalmente por las dificultades de oxígeno para los 44 tripulantes del navío. Hoy es él último día de reserva, según su cálculo.

“No hay novedades en los barridos y los patrullajes marítimos. Las esperanzas no las perdemos nunca, pero la incertidumbre va creciendo y de a poco entramos en una etapa crítica”, sostuvo Balbi al brindar anoche el último parte oficial del día.

Todo es una mezcla de sensaciones contrapuestas en la base marplatense: dolor, impotencia, por momentos esperanza.

Tras haberse ilusionado con indicios que resultaron negativos, como las llamadas y los ruidos, la incertidumbre se transforma siempre en angustia.

Misa

Poco después de las 17, el obispo castrense Santiago Olivera llego a la base naval. Un hombre calvo, algo robusto, de aspecto manso. Oficio una misa en el lugar reservado de la base. Lejos de miradas ajenas.

En el oficio estuvieron el padre y dos hermanos de Mario Toconás, el tripulante de Sierra Grande que viaja el submarino. Todos se sumaron a Rut, la esposa del marinero que lo espera embarazada del segundo hijo.

Rosana Toconás contó ayer que en la base naval hay mucha tensión. “Acá sucede de todo, la gente se descompensa, se desmaya. Hay madres, hermanos, pero por suerte estamos atendidos por psicólogos, médicos enfermeros que están pendientes de todo” explicó la joven.

Junto a ella está firme su esposo David, y junto a ellos Noa, la pequeña de dos años y medio, ahijada de Mario Toconás. La nena comparte cada momentos con sus padres.

Rosana expresó que ya no los dejan ver TV en la base por el bombardeo de información que confunde .

El área de operaciones de búsqueda es de todos modos un lugar lejano e impreciso para las familias. Es difícil hacerse una idea real de que señales se buscan y donde. Mucho menos en qué perímetro. La superficie de dos veces la Capital Federal, dice alguien. Una provincia de Buenos Aires, completa otro. No son lo mismo, obvio para quien revise un mapa. Pero todo provoca un impresión de inmensidad en el mar.

La literatura enseña que un barco es una pequeña muestra de la sociedad. En tierra se adivina algo de eso cuando uno ve a las familias de los tripulantes del ARA San Juan, a sus colegas submarinistas, a sus amigos.

Como ya han hecho otros familiares, Malvina colgó su propio cartel. Es hermana de Celso Valllejos, de 38, tripulante del ARA San Juan, especialista en comunicación y padre de tres chicos. Los dos son hijos de un marino retirado, ex combatiente del la guerra del Atlántico Sur. “Nos emociona que la gente esté junto a nosotros”, dice Malvina. Tiene 26 años. Muestra una entereza que conmueve.

Lo primero que se aprende aquí es que la noción del tiempo y la información es diferente de la que uno maneja a diario. Esta es gente acostumbrada a largos periodos de ausencia. Conocen poco de las obligaciones de su familiares embarcados. Administran unos pocos datos sobre como son sus días y sus noches. Conviven con el misterio que encierra desde tiempos inmemoriales el mar. Y esperan, pacientemente. “Al menos una vez al día me acerco a la orilla. Y le pido al mar que me lo devuelva “, dijo ayer la Tucumán María Morales, la mamá del cabo electricista Luis García.

Las baterías eran el talón de Aquiles y estaría en el lecho marino

“El valor no es estricto, sino de acuerdo a las circunstancias, pero entramos al sexto día en cuanto al oxígeno y es preocupante”.

l vocero de la Armada, Enrique Balbi, sobre la situación de la búsqueda.

Ya participan 12 países con tecnología de punta pero no hay rastros

La búsqueda del submarino se intensificó ayer con fuerte apoyo internacional y un mejor clima pero no hubo señales esperanzadoras. La situación es extrema: hoy se cumple el séptimo día, límite para la capacidad de oxígeno de los 44 tripulantes, siempre que la nave está sumergida, como indican las voces de los expertos.

Del vasto operativo de ayer participaron embarcaciones de 12 países con tecnología de punta. Todos con sondas multihaz, que permiten hacer un barrido tridimensional del fondo.

Hoy se suma una misión de la Marina de los Estados Unidos que buscará al submarino en las profundidades usando robots sumergibles. (Ver infograma)

Los esfuerzos se concentraron ayer en áreas más chicas, tras cubrir el 100% de la zona frente a Península de Valdés, donde el submarino realizó su última comunicación el miércoles pasado.

“La fase de búsqueda sigue hasta localizarlo”, anunció ayer el vocero de la Armada, Enrique Balbi. E insistió con que el “San Juan” tiene capacidad de oxígeno para su tripulación por siete días y siete noches. Como submarinista, no pierdo esperanzas”.

Por su parte, el portavoz naval Gabriel Galeazzi dijo en Mar del Plata que la corbeta Rosales y el destructor Sarandí “engancharon” ayer una balsa vacía que estaba a la deriva y había sido detectada en la madrugada por una aeronave.

“De acuerdo a la marca y la nomenclatura que llevaba esa balsa, consultado con comandante de la fuerza de submarinos que se encuentra en el Centro de Coordinación de Búsqueda y Rescate, en Puerto Belgrano (se verificó) que no corresponde al submarino”, sostuvo en diálogo con la prensa.

Galeazzi informó, además, que un aeronave estadounidense divisó dos bengalas blancas en la zona de búsqueda del submarino, por lo que se está investigando su procedencia.

Efectivos

“El valor no es estricto, sino de acuerdo a las circunstancias, pero entramos al sexto día en cuanto al oxígeno y es preocupante”.

El vocero de la Armada, Enrique Balbi, sobre la situación de la búsqueda.

Se sigue haciendo todo lo posible para encontrar el navío de la Armada Argentina, desplegando todos los medios nacionales e internacionales disponibles para encontrarlos lo antes posible.

El presidente Mauricio Macri habló ayer sobre los operativos.

Datos

La disminución de la altura de las olas facilitaron ayer el patrullaje de los buques y aviones de EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Alemania, Noruega, Italia, Brasil, Chile, Uruguay, Perú y Colombia.
Se sumaron al despliegue argentino de 14 barcos militares, tres de Prefectura Naval Argentina, y cinco aviones. En total participan del operativo más de 50 medios navales y aéreos entre los que están activos en el área de operaciones y a disposición.
En la comunidad de submarinistas coinciden en que baterías eran el talón de Aquiles de submarinos como el “ARA San Juan” y que el miércoles el comandante de la nave había reportado una avería eléctrica. Se cree que las baterías fueron el origen de los problemas. Y quela nave estaría en el fondo marino, a 200 metros de profundidad.
“El valor no es estricto, sino de acuerdo a las circunstancias, pero entramos al sexto día en cuanto al oxígeno y es preocupante”.
4.000
El número de personas de doce países que participaron ayer de la amplia búsqueda
por mar y cielo.
“El valor no es estricto, sino de acuerdo a las circunstancias, pero entramos al sexto día en cuanto al oxígeno y es preocupante”.

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