Los balnearios de Neuquén otra vez en peligro por la contaminación

La AIC comenzó a tomar muestras del río para determinar la presencia de bacterias fecales, estudio determinante para permitir bañarse. Los desagües cloacales y el bajo caudal complican la situación. El año pasado se cerró el Albino Cotro.

Son 3.000 metros de un brazo del río Limay que abraza la isla 132 desde el final del Río Grande hasta la calle Linares. Un desagüe pluvial misterioso que también transporta líquidos cloacales y la descarga del arroyo Durán cuyas antiguas compuertas son sobrepasadas por el caudal, lo llenan de bacterias. La bajante del río Limay fue la frutilla de la torta que provocó el efecto del agua estancada.

La municipalidad de Neuquén informó que la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas, AIC, comenzaba a tomar cinco muestreos en los balnearios a partir de esta semana, luego del pedido que se le hizo porque se pretende adelantar la temporada desde el 15 de noviembre, antes de hacía desde el 1 de diciembre.

“No vamos a tener problemas este año con el agua para consumo de las ciudades, del riego y de la recreación”, dijo el representante de Neuquén en la AIC, Elías Sapag, quien indicó que los laboratorios donde se analizan las muestras están fiscalizados por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial, INTI.

Te puede interesar Los clubes sufren el Limay con bajo caudal y la contaminación del agua

El año pasado se decidió cerrar el balneario Albino Cotro, ubicado en el brazo que rodea la isla 132, se cerró porque se detectó que había 211 partes de bacterias fecales por cada 100 mililitros de agua, cuando lo que se acepta como tolerable es de 200 partes a fin de que tenga uso recreativo, no potable. Para tener un parámetro en la isla Jordán de Cipolletti donde se acumulan las bacterias de las plantas de tratamiento de la vecina localidad, se detectan más de 400 partes de escherichia coli, es decir que Neuquén ya estuvo por la mitad. Al río descargan las plantas de Senillosa y Plottier, antes del balneario. La planta Tronador está más cerca de la confluencia, aguas abajo.

El concejal Francisco Baggio (FN) dijo que “la situación no ha variado, el Durán sigue igual y el pluvial que desagua entre los clubes también” por lo que pronosticó que es probable que este año tampoco se permita el uso de la ribera del brazo del Limay en el Albino Cotro.

En la jornada de ayer por indicación del Estado provincial se comenzó a realizar el fortalecimiento del espigón que por más de 300 metros se extiende desde el extremo suroeste de la isla hacia el centro del río que oficia como contenedor para desviar agua al brazo donde están los clubes y el balneario. “Este espigón lo hicimos hace muchos años pero no para llevar agua al brazo del río sino para que la bomba del EPAS ubicada al final de la calle Río Negro tuviera agua”, contó uno de los obreros que participaba de las primeras tareas. Explicó que se trata de piedras que traen desde la barda de Plottier y que, la idea es que sea poroso para que cuando el río crezca se pueda filtrar y derribar en parte.

Te puede interesar Contaminación: piden apartar a una fiscal

Sebastián Rivanera es uno de los vigías de la isla con su local de ecoturismo y contó que es proclive a respetar la naturaleza. Indicó que “cuando se abrió el puente y se hicieron los senderos, todo el mundo decía que no iban a haber más pájaros y que se iba a desmontar, pero lo cierto es que la gente respeta mucho y se mantuvo el bosque ribereño”.

Contó cómo se ve desde una canoa la descarga del pluvial y que cuando realiza flotadas por el brazo los visitantes pueden observar cómo el agua sobrepasa las compuertas del arroyo Durán, que va al curso principal del río

Los puntos del verano

“Vine a Neuquén por unos días desde Florencio Varela. Es interesante lo que tienen acá, se puede disfrutar del paseo a la orilla del río”.

José Jaimes, responsable de una instalación térmica en la ciudad.

“Ésta es la novena temporada que me decido a hacer ecoturismo en el río. Espero que haya más caudal para las flotadas”.

Sebastián Rivanera, responsable de la empresa Sendas Patagónicas.

Un espigón para contener el agua

Este injerto no natural en el río Limay fue construido con piedras acumuladas desde la barda de Plottier hace 30 años para que las bombas del EPAS tuvieran agua para succionar e inyectar a la red de la ciudad. Desde hace 7 años que la Autoridad de Cuencas no tiene presupuesto para obras por una cuestión de costos de la energía y su consolidación está en espera. Recursos Hídricos de Provincia comenzó ayer una tarea de fortalecimiento pero Elías Sapag sostuvo que se necesitaría ampliarlo varios metros para poder “frenar” un poco el caudal y llevarlo hacia el brazo del río que baña los balnearios.

A juicio del concejal Francisco Baggio, Neuquén debe dejar de privilegiar la generación de energía por sobre los intereses ambientales. “Nos manejamos al ritmo de lo que dice Cammesa, cuando dice eroguen, se eroga, cuando le dicen guarden porque el verano va a ser caluroso, guardan como hacen ahora que recuperan los embalses”, dijo. Indicó que si se lograra que entre más caudal de agua por efecto del espigón se mejoraría la situación “pero será un parche momentáneo” porque se derribará cuando hay más caudal.

“La isla es muy agradable, lástima que la gente no la cuida. Hay muchos que tiran basura y dejan a los perros sueltos”.

Roxana, santafesina que hace varios años vive en Neuquén.

Lo permitido

Datos

31
son los balnearios de los tres ríos. Nueve están en el Limay, tres en el Neuquén y 19 en el río Negro.
“Vine a Neuquén por unos días desde Florencio Varela. Es interesante lo que tienen acá, se puede disfrutar del paseo a la orilla del río”.
“Ésta es la novena temporada que me decido a hacer ecoturismo en el río. Espero que haya más caudal para las flotadas”.
“La isla es muy agradable, lástima que la gente no la cuida. Hay muchos que tiran basura y dejan a los perros sueltos”.
200
son las partes de escherichia coli por cada 100 mililitros de agua para calificar la aptitud.

Continua sin habilitarse el Albino Cotro para bañarse en el brazo del Limay. Desde la municipalidad comunicaron que la última muestra tomada el lunes pasado, arrojó 231 de densidad de la bacteria Escherichia Coli, contra los 211 que había dado en la medición del 5 de enero.

El jueves pasado la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) había informado que los valores daban bien, pero desde el municipio optaron por extender la prohibición por una semana más. Ayer, la secretaria de Desarrollo Humano, Yenny Fonfach informó que las mediciones siguen siendo altas y es por eso que mantendrán la prohibición de manera preventiva.

“Si se hace un promedio de las últimas 5 mediciones de acuerdo a lo que establece el protocolo de actuación, nos da un indicador de 156, por eso la AIC lo declara apto pero la última muestra particular dio un nivel elevado de la densidad de Escherichia Coli (231 cuando el máximo permitido es 200), por eso decidimos mantener la no habilitación hasta recibir un nuevo informe”, dijo la secretaria y agregó que los valores son muy inestables.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios