en el predio de “La Escuelita”

La primera etapa será de señalamiento y colocarán la cartelería. Tendrá un museo y salas de conferencia. Realizarán actividades de promoción y educación sobre los derechos humanos.

El predio donde funcionó el centro clandestino de detención “La Escuelita” durante la dictadura militar del 76, lindero al cuartel del Ejército en la Ruta 22, será convertido en el Parque de la Memoria.

El gobierno nacional, a través del Ministerio de Defensa, desafectó una zona de cuatro hectáreas para desarrollar un espacio temático que tendrá como eje la educación, promoción y defensa de los derechos humanos.

Días atrás la secretaria de Derechos Humanos de Neuquén, Alicia Comelli, cerró el convenio por el cual el gobierno provincial se hace cargo del lugar y asume el compromiso de comenzar con las obras.

“La expectativa es que en marzo iniciemos los trabajos de cerramiento y señalización. Por lo pronto, a partir del trabajo de técnicos de la secretaría de Obras Públicas, se comenzó con los estudios para la mensura del terreno”, comentó la funcionaria.

Para esa fecha se piensa tener de mínimo iniciadas las tareas de señalamiento, que se hace con cartelería aportada por el área de Sitios de la Memoria de Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, y es idéntica en su estilo y color a los sitios reconocidos en todo el país.

El parque, en principio, tendrá su portal de ingreso en el punto donde calle Chaco intercepta con Lanín -ambas abiertas y asfaltadas recientemente en ese sector-, con cien metros a cada lado de ese punto, al este y oeste respectivamente, y doscientos hacia el sur del terreno

“Hicimos todo el trámite en el ministerio de Defensa, que es el organismo que ordenó la desafectación del lugar en el marco de la ley nacional de sitios. No es una cesión de la tierra, tiene el fin específico que es la construcción del parque”, explicó Comelli.

Añadió que el traspaso de la tierra “no es voluntario, no es un acuerdo, es una ley nacional por la cual se impone la puesta en valor de lo que fueron los centros clandestinos” que funcionaron en distintas partes del país.

La desafectación del lugar tuvo como base el dictamen favorable que hizo un equipo de científicos de Sitios de la Memoria, que en función de los restos de la construcción recogidos, más la abundante prueba acumulada en la Justicia en la tramitación de los juicios ya realizados y en desarrollo, y el aporte de personas que fueron mantenidos ilegalmente en ese lugar, confirmaron que se trata del sitio donde funcionó “La Escuelita”. (Ver aparte).

“Ese dictamen que se emitió en octubre pasado fue clave para la desafectación del lugar. Pero se trata de una cesión transitoria, si la Provincia y el área respectiva de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación no cumplen con el compromiso de las obras, vuelve a jurisdicción nacional”, precisó.

Aún cuando debe pensarse el diseño del parque, se adelantó que se piensa en una parquización con algún edificio para afectarlo a museos, sala de conferencias y actividades a fines al tema de los derechos humanos.

“Será una exEsma, que se recuperó para instituciones, estatales o privadas, pero con el mismo sentido de construir ciudadanía. Ese el objetivo y a la vez sentido esencial de la iniciativa: que la gente participe”, dijo Comelli.

A pocos metros de la línea de calle estaba el centro clandestino de detención de pesonas, en la dictadura militar del 1976.

matías subat

Relevamiento de

la construcción

El reconocimiento que en mayo pasado hizo un equipo de científicos -antropólogos, arquitectos, arqueólogos y sociólogos- de Sitios de la Memoria fue la llave que posibilitó la asignación del predio para la construcción del parque.

Trabajaron durante tres días recuperando elementos de la superficie del terreno, particularmente restos de mampostería ya que como se sabe las autoridades del cuartel, desoyendo la resolución del exjuez federal Rodolfo Rivarola, demolieron la edificación en lo que se interpreta como una clara intención de no dejar huellas del centro clandestino.

La arqueóloga Silvia Durán, la arquitecta Lucía De Lisi y la socióloga Valeria Maidana, que estuvieron a cargo del relevamiento se valieron, además de documentación, de testimonios de víctimas que estuvieron secuestrados en el centro clandestino y lo reconocieron posteriormente.

“Neuquén era la única provincia que no tenía el sitio de la memoria señalado. Ahora cumplimos los requisitos y dimos
el primer paso”.

Alicia Comelli, subsecretaria de Derechos Humanos de Neuquén.

El terreno

Datos

“Neuquén era la única provincia que no tenía el sitio de la memoria señalado. Ahora cumplimos los requisitos y dimos
el primer paso”.
4
hectáreas se destinaron al proyecto, que se pretende sea un parque temático para la reflexión.

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