Cero escándalo y mucho hip hop en MTV

MIAMI, (DPA).- Un año después del beso con lengua entre Madonna y Britney Spears, los MTV Video Music Awards volvieron a ser «aptos para todos los públicos». La nota destacada de la 21 edición de estos galardones de la cadena de videos musicales fue el predominio de los astros del hip- hop.

Los raperos Jay-Z y el dúo Outkast se llevaron la noche del domingo en Miami cuatro estatuillas cada uno. Además, el cantante de rhythm & blues Usher obtuvo la distinción al mejor video de un artista masculino, mientras que su colega Beyoncé Knowles se la llevó en el apartado femenino.

Esta vez no hubo sorpresas. El supershow en Florida fue una puesta en escena perfecta y transcurrió sin sobresaltos.

Tuvo su carga erótica y ofreció un despliegue de estrellas, pero no hubo pechos al descubierto ni traseros en exhibición, como en otros eventos de este tipo.

En general, hubo poca piel desnuda. Hasta Jennifer Lopez se cubrió con gran cantidad de tela. Madonna y Britney se quedaron en sus casas.

Usher consiguió el premio al mejor video masculino con su clip «Yeah» del disco «Confessions Part II». También obtuvo el de «mejor video dance». El rapero Jay-Z ganó con el que supuestamente es su último video, «99 Problems», el galardón al mejor clip de rap, tras llevarse los trofeos a la mejor dirección, la mejor edición y la mejor fotografía. Jay-Z aseguró que pronto se retirará del negocio de la música.

El rapero se quedó sin el premio principal, el de «video del año», que fue a parar a manos de Outkast con «Hey Ya». Este grupo obtuvo además el premio al mejor video de hip-hop.

El premio MTV al mejor video de rhythm & blues fue para la ganadora de varios Grammy Alicia Keys por su canción «If I Ain't Got You».

La banda californiana No Doubt se alzó con la estatuilla en la categoría de mejor video pop con «It's My Life» y fue distinguida además con el premio al mejor video de un grupo.

Jet se impuso con «Are You Gonna Be My Girl» en la categoría de mejor video de rock mientras que Linkin Park recibió el «premio del público».

Por primera vez en sus 21 años de historia, la ceremonia de tres horas y media no tuvo lugar en Nueva York o Los Angeles, sino en el sur de la Florida.

Tras las experiencias de los últimos años, MTV emitió el show con unos segundos de retraso y aprovechó ese recurso para eliminar alguna palabra demasiado fuerte o algún texto obsceno.

La víspera de la convención republicana y unos dos meses antes de las elecciones presidenciales, la política tuvo un papel inusualmente fuerte.

La cadena permitió a las hijas del presidente estadounidense, George W. Bush, las mellizas Jenna y Barbara, así como a las hijas del candidato demócrata John Kerry, Vanessa y Alexandra, hacer campaña por sus padres.

«Voten o pierdan», fue además el lema con el que se cerró la ceremonia, cuando el escenario se llenó de globos con los colores de la bandera estadounidense.

De esta manera, MTV sigue adelante con su compromiso político. Desde hace años, la cadena hace campaña para que los jóvenes vayan a votar. En Estados Unidos, sólo una de cada dos personas con derecho a votar lo hace, y entre los jóvenes la participación en los comicios es especialmente baja.