Rastrean movimientos de dinero de «La familia»

NEUQUEN (AN).- Los movimientos de dinero de los presuntos líderes de «La familia» están en la mira de los investigadores. Creen que si encuentran rastros de algún depósito en cuentas bancarias o la recepción de giros por importantes sumas de dinero sin justificación, estarán ante la prueba de que comercializaban los videos en los que registraban escenas de chicos de Las Lajas besándose y acariciándose.

Algunas versiones sin confirmar indicaban ayer que los investigadores ya tendrían en su poder datos sobre movimientos de dinero de algunos de los tres detenidos, pero les falta establecer su procedencia y el motivo. «Si la justificación que brindan es poco creíble, será otro indicio en su contra», explicó una fuente.

Si se llegara a probar que comercializaban videos o fotos, la situación de los detenidos se agravará. Porque hasta ahora la justicia no logró establecer para qué filmaban a los adolescentes, ni tiene pruebas de que hayan vendido esas imágenes o se las hayan exhibido a alguien con algún fin determinado.

A más de una semana de que estallara el escándalo, en Las Lajas la situación es de expectativa por el avance de la investigación judicial. La localidad recibió una invasión de asistentes sociales que están conteniendo a padres y chicos por disposición del gobierno provincial y la detención de los tres sospechosos calmó los ánimos.

Sergio Pérez (28 años), Feliciano Ojeda (24) y Gabriel Villordo (18) están sindicados como presuntos líderes de «La familia», una organización de captaba adolescentes y los instaba a superar una serie de «pruebas» o «prendas» para crecer dentro del grupo y adquirir «más poder».

Un relevamiento de este diario comprobó que por lo menos 60 chicos tenían algún grado de vinculación con la organización, y eran muchos los que estaban dispuestos a cualquier cosa para ingresar.

Las «prendas» iban desde escribir leyendas en el puente sobre el río Agrio hasta emborracharse. Pero lo más fuerte que se descubrió hasta ahora es que también les requerían que se dejaran filmar en situaciones íntimas, si bien aún la justicia no logró demostrar que los chicos tuvieran sexo entre ellos.

El único video comprometedor secuestrado hasta ahora muestra, como adelantó «Río Negro», a dos parejas de menores en ropa interior besándose y acariciándose en una cama.

¿Qué destino pensaban darle a esa filmación? ¿Hubo otras? Son algunas de las preguntas que se formulan los encargados de la pesquisa. Entre sus hipótesis de trabajo figura una resaltada con rojo: que el video tenía como finalidad su comercialización.

Hasta ahora, Pérez, Ojeda y Villordo se negaron a aclarar los graves cargos que pesan en su contra. El abogado Rubén Bortolatto, que patrocina a los dos últimos, dijo que posiblemente hoy o mañana acepten declarar.

«Espeluznante»

NEUQUEN (AN).- El subsecretario de Seguridad, Hugo Acuña, confirmó que la justicia tiene secuestrados CPU y agendas que podrían contener valiosa información sobre el accionar de «La familia» en Las Lajas.

Por otra parte, el funcionario destacó que el gobierno les está brindando contención y apoyo a los padres y adolescentes de la localidad. «Hay una comunidad consternada por estos hechos» y «es realmente espeluznante lo que hemos vivido», dijo.

Acuña estuvo en Las Lajas para seguir el caso desde el terreno. En declaraciones que difundió el boletín de prensa oficial, dijo que «el gobernador envió inmediatamente a las carteras de Salud, Educación y Seguridad para trabajar con las organizaciones intermedias y la intendencia con el propósito de atacar de lleno este problema, fundamentalmente con los adolescentes, los papás, y la comunidad educativa».

También señaló que «hay que hacer una autocrítica de toda la sociedad porque estos tres imputados ingresaron en la vida de los adolescentes en lo que más les gusta, el deporte».

Según Acuña, «ha habido una importación cultural de costumbres, de corrientes que vienen de afuera y sobre todo esta secta, que ha nacido en California. Este reduccionismo espiritual los ha llevado a captar a los chicos con el deporte. Luego cuando fueron avanzando en la composición de ese grupo, los indujeron a determinadas prácticas, que eran prendas, y cuando los adolescentes no las superaban les implicaban un apartamiento».