Uber y Cabify: el debate sobre derechos laborales y las economías locales
Las plataformas Uber y Cabify enfrentan fuertes resistencias en todo el mundo, incluyendo Argentina. Ante la posibilidad de que lleguen a Neuquén y Río Negro, repasamos los principales puntos de discordia entre ambas ofertas.
Mientras tanto el debate sobre el uso de las aplicaciones de servicios de transporte se expande en Río Negro.
La expansión de aplicaciones como Uber y Cabify sigue generando tensiones con el sector del taxi en muchas ciudades del mundo, algo que no escapa a Neuquén y Río Negro. Organizaciones gremiales han señalado una serie de problemáticas vinculadas a la regulación, los derechos laborales y el rol de estas plataformas en la economía local. Como contrapartida, las empresas destacan beneficios en rapidez, cobertura y opciones de viaje.
Estas plataformas como Uber y Cabify «no ofrecen un servicio público: priorizan el negocio y desatienden derechos básicos del usuario y del conductor”, advirtió la Asociación Gremial de Auto Taxi de Madrid, que denunció que el 25% de cada viaje se lo queda Uber y que sus chóferes deben trabajar entre 14 y 16 horas diarias para sostener ingresos básicos. Aunque el caso corresponde a Madrid, gremios de taxis en distintas ciudades coinciden en que estas prácticas se repiten con frecuencia.
Críticas frecuentes a Uber y Cabify: principales controversias
Las críticas se centran en aspectos como la falta de vehículos adaptados para personas con movilidad reducida, la ausencia de controles públicos sobre los antecedentes de los conductores y los criterios de tributación en el exterior. Además, los taxistas remarcan que muchas veces los usuarios deben aceptar condiciones de uso que los obligan a reclamar judicialmente fuera de su país, como ocurre en el caso de Uber con tribunales en Ámsterdam.
Por su parte, tanto Uber como Cabify defienden su modelo de negocio desde una perspectiva tecnológica y de sostenibilidad. Cabify, por ejemplo, afirma que su misión es “transformar las ciudades en mejores espacios para vivir a través de la movilidad”, y asegura operar bajo principios éticos y sostenibles. La empresa, nacida en Madrid en 2011, está presente en seis países —entre ellos Argentina— y moviliza a más de 40.000 empresas, con una red que incluye a 1,5 millones de socios conductores y taxistas.
Críticas frecuentes de los gremios de taxis a plataformas como Uber y Cabify
Las principales críticas que presentan los gremios de taxistas en todo el mundo contra plataformas como Uber y Cabify son:
- El 25% de cada viaje queda en manos de la plataforma, y el resto debe cubrir impuestos y gastos del conductor.
- Las jornadas laborales de los choferes suelen ser extensas y con bajos ingresos, lo que genera precariedad.
- No existe una flota adaptada para personas con movilidad reducida.
- Las empresas tributan fuera del país, lo que impide que esos ingresos beneficien a las economías locales.
- Los mecanismos de reclamo están condicionados por términos de uso que derivan la resolución a tribunales extranjeros.
- Los conductores no siempre pasan controles oficiales ni presentan certificados de antecedentes penales.
- La plataforma impone rutas según sistemas como Google Maps, sin posibilidad de ajuste por parte del pasajero.
- En contextos de alta demanda, los precios aumentan sin control, afectando al usuario final.
¿Qué destacan Uber y Cabify como fortalezas de su servicio?
Por su parte, Uber y Cabify se defienden ante las críticas de los gremios de taxistas y señalan a su favor que:
- Uber y Cabify están presentes en decenas de países y miles de ciudades alrededor del mundo.
- Las apps ofrecen múltiples servicios: viajes individuales, compartidos, entregas, transporte de carga y soluciones para empresas.
- Cabify declara tener más de 50 millones de usuarios y una red de 1,5 millones de conductores y taxistas.
- Las plataformas permiten gestionar viajes desde una app, con estimación de tarifas y seguimiento en tiempo real.
- Uber y Cabify argumentan que brindan oportunidades laborales flexibles y autogestionadas.
- Ambas empresas afirman operar bajo compromisos de sostenibilidad, tecnología e innovación.
- Cabify forma parte del Pacto Mundial de la ONU y adhiere a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
- La cobertura suele ser más amplia en horarios nocturnos o zonas con menor disponibilidad de taxis tradicionales.
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