Exigirán la verificación técnica vehicular
Lo anunció la municipalidad de Neuquén
NEUQUÉN (AN).- Se lanzará como una campaña de concientización, pero a medida que se vaya aplicando la ley nacional de seguridad vial, el municipio se pondrá más firme en la exigencia de la verificación técnica vehicular. El objetivo es utilizar este requisito para controlar las emisiones de humo y ruido de los autos y motos que, por desperfectos mecánicos o por modificaciones implementadas por sus propietarios, contaminan el medio ambiente. El Ejecutivo también espera la sanción de otra herramienta, en este caso local, para salir a controlar con los inspectores: el nuevo código de faltas municipal. Saldrá como ordenanza antes de fin de año y, entre otras cosas, castigará a los padres por los daños que produzcan sus hijos menores de edad. Consensuado durante meses en las comisiones del Concejo Deliberante, también actualiza las exigencias municipales para el tránsito en la ciudad. La nueva exigencia fue confirmada por el secretario de Gobierno, Raúl Dobrusín. “Con el tiempo se fue perdiendo el uso de la ley y los dos talleres de la ciudad quedaron para controlar a las empresas. Pero la nueva ley de seguridad vial se retomó el tema de la verificación técnica obligatoria”, explicó el funcionario. La exigencia no será inmediata. “Que los que puedan vayan cumpliendo”, pidió el funcionario, pero reconoció que los talleres no están adecuados a las exigencias ni a la demanda que generarían operativos masivos para exigir la revisión. “Van a venir aparatos nuevos para colocar en los escapes y verificar gases y ruido, ya no sólo la amortiguación del auto”, anticipó. Los controles se aplicarán también a motos. Antes de sancionar, la municipalidad lanzará una campaña de prevención, midiendo y controlando ruido y emisiones en las calles. Una vez que entre en vigencia el nuevo Código de Faltas se terminarán las concesiones: “sin sanción, parece que no funciona”, argumentó Dobrusín.
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NEUQUÉN (AN).- Se lanzará como una campaña de concientización, pero a medida que se vaya aplicando la ley nacional de seguridad vial, el municipio se pondrá más firme en la exigencia de la verificación técnica vehicular. El objetivo es utilizar este requisito para controlar las emisiones de humo y ruido de los autos y motos que, por desperfectos mecánicos o por modificaciones implementadas por sus propietarios, contaminan el medio ambiente. El Ejecutivo también espera la sanción de otra herramienta, en este caso local, para salir a controlar con los inspectores: el nuevo código de faltas municipal. Saldrá como ordenanza antes de fin de año y, entre otras cosas, castigará a los padres por los daños que produzcan sus hijos menores de edad. Consensuado durante meses en las comisiones del Concejo Deliberante, también actualiza las exigencias municipales para el tránsito en la ciudad. La nueva exigencia fue confirmada por el secretario de Gobierno, Raúl Dobrusín. “Con el tiempo se fue perdiendo el uso de la ley y los dos talleres de la ciudad quedaron para controlar a las empresas. Pero la nueva ley de seguridad vial se retomó el tema de la verificación técnica obligatoria”, explicó el funcionario. La exigencia no será inmediata. “Que los que puedan vayan cumpliendo”, pidió el funcionario, pero reconoció que los talleres no están adecuados a las exigencias ni a la demanda que generarían operativos masivos para exigir la revisión. “Van a venir aparatos nuevos para colocar en los escapes y verificar gases y ruido, ya no sólo la amortiguación del auto”, anticipó. Los controles se aplicarán también a motos. Antes de sancionar, la municipalidad lanzará una campaña de prevención, midiendo y controlando ruido y emisiones en las calles. Una vez que entre en vigencia el nuevo Código de Faltas se terminarán las concesiones: “sin sanción, parece que no funciona”, argumentó Dobrusín.
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