En río negro fueron dispares los

Carolina Zilvestein

czilvestein@rionegro.com.ar

C

omenzó otro año y con él se desató una nueva ola de acuerdos salariales.

El ritmo de la inflación y las expectativas que se tienen acerca de ella para el resto del año serán claves para definir qué resultará de los acuerdos que se alcancen.

Pero, además de tener en cuenta las variables a futuro, será importante también analizar cuál fue el desempeño de las mismas en el pasado, lo que permitirá posicionar a algunos sectores mejor que a otros a la hora de reclamar aumentos salariales.

Si se consideran los últimos dos períodos electorales en la provincia de Río Negro, del 2007 al 2010, se puede apreciar que en la provincia el sector Salud fue el más favorecido respecto de los aumentos salariales reales –o sea, descontando el efecto inflacionario–.

En el ranking de los más (y menos) favorecidos, en el segundo puesto se encuentran los empleados del Poder Legislativo, seguidos por los de los sectores de Seguridad y Educación.

Sólo los dos primeros lograron superar los incrementos de precios observados entre el primer trimestre del 2007 y el tercer trimestre del 2010, mientras que los empleados de Seguridad y Educación vieron disminuida su capacidad de compra.

Respecto del Poder Judicial, los datos consultados no son compatibles con los obtenidos para el resto de los sectores, pero sí se puede decir que en el acumulado del período analizado no pudo sobrepasar el incremento de precios.

Para los gremios que representan las distintas actividades este año el panorama no parece presentarse tan claro como en los anteriores, si se trata de discusiones y acuerdos de mejoras de sueldos, ya que el gobierno nacional intenta “controlar” los aumentos estableciendo como límite el 20% anual.

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