Palabra de experto

Chapelco tiene una altura de 1.980 msnm. El largo máximo de pista es de 5,3 kilómetros y sus pendientes van de los 20 a los 45° de inclinación. Tiene 28 pistas de distintos niveles de dificultad en sus más de 1.600 hectáreas de área esquiable. Aquí, el diálogo con Miguel Righetti, jefe de Pisteros y Patrulleros del cerro. –¿Cómo es el cerro en septiembre? –Cambia el clima, se acerca la primavera, la nieve es un poco menos fría, pero buena para esquiar. Por estos días en el cerro está todo habilitado, todo abierto. –¿Hay recomendaciones de seguridad específicas para este mes? –Sólo que la nieve es un poco más dura por la mañana, hay que tener un poco más de precaución. El resto, lo usual, lo contenido en las diez normas de la FIS, que hay que conocer y respetar. Entre otras: estar en la pista que corresponde a nuestro nivel, no circular a alta velocidad en zona de principiantes ni de enganches de medios, precaución en los cruces de pista, estar atento a los otros esquiadores, no detenerse en un lugar que no puede ver el que viene de arriba. También es clave preguntar las condiciones de la montaña cada mañana, estar bien informado para no tener sorpresas arriba. El cerro no es el mismo cada día. –¿Y respecto a los fuera de pista? –Avisar siempre al servicio de patrulla y conocer los itinerarios. –¿Qué otra zona recomendás para quienes se inician? –Toda el área de la pista y la silla 63. La cinta también es muy práctica. Es la zona justa para dar los primeros pasos.