Ecología para el hogar patagónico

Una fundación entregará hornos y cocinas solares en el municipio de sierra grande.

La Fundación Patagonia Natural (FPN) subió la apuesta y amplió la escala de sus objetivos con los que busca aportar soluciones alternativas al abastecimiento energético y reducir la huella de los Gases Efecto Invernadero (GEI). La semana pasada cerró un convenio con el municipio de Sierra Grande para el aprovisionamiento de hornos, cocinas y calefones solares. Al igual que sus anteriores proyectos, la propuesta está orientada a beneficiar a los sectores más vulnerables. “Ésta es una línea de trabajo que desarrollamos desde el 2012 y en la que nos vinculamos con pequeñas experiencias a comunidades aisladas. La idea es mostrar y que se conozcan estas tecnologías de bajo costo y mantenimiento”, explica Ricardo Delfino, biólogo a cargo del convenio por la FPN. De acuerdo con las bases originales del proyecto, el objetivo general del mismo es “promover y contribuir al uso de energías renovables a escala local, reemplazando el uso de fuentes fósiles, y procurar el manejo adecuado de los residuos orgánicos en pequeños centros urbanos de la estepa patagónica”. El acuerdo además incorpora la donación de composteras realizadas en madera por alumnos de una escuela especial. “El beneficio es doble en este caso porque además de generar una alternativa para los residuos se posibilita el desarrollo laboral de los chicos”, dice Delfino. Anteriormente la FPN realizó una prueba en un pequeño paraje del Chubut con no más de 80 pobladores. Luego sumaron otras acciones en Puerto Madryn y Península Valdés. El desafío, cuenta Delfino, es elevar cada vez más la escala de los proyectos. Las cocinas y los hornos los fabrican con un diseño implementado por un jubilado del Conicet. La propuesta además incluye la capacitación en el mantenimiento y la manipulación de los equipos en las condiciones particulares que ofrece la estepa patagónica. En cuanto a los calefones, debido a su complejidad, son adquiridos al mercado nacional. El convenio con el municipio de Sierra Grande se implementará por el período de un año. Actualmente se encuentran a la espera de que se destraben los fondos que aportará la Embajada de Finlandia. Sin embargo, desde la FPN son optimistas y anticipan que el cronograma podría empezar a correr el próximo 15 de agosto. “Se trata de saldar una brecha que, somos conscientes, no se trata del reemplazo absoluto de las energías fósiles o de la combustión por maderas, pero en lo que no vamos a ceder es en promover los beneficios que brindan las alternativas. Seguramente sea un camino más lento, pero estamos convencidos”, finaliza Delfino.

El acuerdo se firmó la semana pasada en el municipio rionegrino.


La Fundación Patagonia Natural (FPN) subió la apuesta y amplió la escala de sus objetivos con los que busca aportar soluciones alternativas al abastecimiento energético y reducir la huella de los Gases Efecto Invernadero (GEI). La semana pasada cerró un convenio con el municipio de Sierra Grande para el aprovisionamiento de hornos, cocinas y calefones solares. Al igual que sus anteriores proyectos, la propuesta está orientada a beneficiar a los sectores más vulnerables. “Ésta es una línea de trabajo que desarrollamos desde el 2012 y en la que nos vinculamos con pequeñas experiencias a comunidades aisladas. La idea es mostrar y que se conozcan estas tecnologías de bajo costo y mantenimiento”, explica Ricardo Delfino, biólogo a cargo del convenio por la FPN. De acuerdo con las bases originales del proyecto, el objetivo general del mismo es “promover y contribuir al uso de energías renovables a escala local, reemplazando el uso de fuentes fósiles, y procurar el manejo adecuado de los residuos orgánicos en pequeños centros urbanos de la estepa patagónica”. El acuerdo además incorpora la donación de composteras realizadas en madera por alumnos de una escuela especial. “El beneficio es doble en este caso porque además de generar una alternativa para los residuos se posibilita el desarrollo laboral de los chicos”, dice Delfino. Anteriormente la FPN realizó una prueba en un pequeño paraje del Chubut con no más de 80 pobladores. Luego sumaron otras acciones en Puerto Madryn y Península Valdés. El desafío, cuenta Delfino, es elevar cada vez más la escala de los proyectos. Las cocinas y los hornos los fabrican con un diseño implementado por un jubilado del Conicet. La propuesta además incluye la capacitación en el mantenimiento y la manipulación de los equipos en las condiciones particulares que ofrece la estepa patagónica. En cuanto a los calefones, debido a su complejidad, son adquiridos al mercado nacional. El convenio con el municipio de Sierra Grande se implementará por el período de un año. Actualmente se encuentran a la espera de que se destraben los fondos que aportará la Embajada de Finlandia. Sin embargo, desde la FPN son optimistas y anticipan que el cronograma podría empezar a correr el próximo 15 de agosto. “Se trata de saldar una brecha que, somos conscientes, no se trata del reemplazo absoluto de las energías fósiles o de la combustión por maderas, pero en lo que no vamos a ceder es en promover los beneficios que brindan las alternativas. Seguramente sea un camino más lento, pero estamos convencidos”, finaliza Delfino.

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