Resta aprobar presupuestos por 4.200 millones

NEUQUEN (AN).- El gobernador Jorge Sobisch recuperará desde el próximo 10 de diciembre el control de la Legislatura. En consecuencia, tendrá los votos suficientes para pasar por el tamiz legislativo, los presupuestos pendientes de los tres ejercicios últimos que están sin aprobar y representan ejecuciones por unos 4.200 millones de pesos.

Se trata de los presupuestos de los ejercicios 2001, 2002 y 2003 que no lograron superar la Comisión de Hacienda y Presupuesto, donde están atascados.

Aunque, una fuente del próximo bloque del MPN se mostró a favor de aprobar sólo el de 2003, que preveía ingresos por casi 1.600 millones de pesos. Esa cifra ha sido superada por los ingresos extraordinarios por regalías hidrocarburíferas que lo incrementaron hasta rozar aproximadamente los 1.800 millones de pesos.

«Yo he hecho todo el esfuerzo para impulsarlo -aclaró ayer el presidente de la Comisión de Hacienda, el ultrasobischista Eduardo Carbajo-. Pero si hay que buscar culpables somos todos los miembros de la comisión».

Dijo que en la comisión s trataron muchas veces, pero faltó el consenso necesario y la voluntad política para emitir un despacho que habilite su discusión en el recinto. Enfatizó que el Poder Ejecutivo provincial presentó «los presupuestos dentro de los plazos» que exige la Constitución Provincial y están aprobados por el Tribunal de Cuentas de la provincia.

Además, recalcó que en la Comisión están las cuentas de inversión de 2001 y 2002 que también deben ser puestas a consideración de los diputados para su aprobación.

Para el reelecto diputado del ARI Carlos Moraña, la próxima gestión «le va a aprobar a libro cerrado los presupuestos». Y sostuvo que Sobisch está utilizando un «decreto inconstitucional» que dispuso en junio del año pasado para modificar parte de la Ley de Administración Financiera y Control que lo au

toriza a reasignar partidas presupuestarias a los distintos organismos públicos.

De hecho, Sobisch se maneja con el presupuesto prorrogado de 2000, que contemplaba ingresos por unos 1.100 millones de pesos y fue el único que sancionó la gestión que se despide de la Legislatura.

Moraña afirmó que «el oficialismo hizo todo lo posible para que el presupuesto no se trate» y anticipó que «Sobisch tendrá los números suficientes en las comisiones y en el recinto y por eso va a intentar blanquear la ilegalidad de haber aumentado por decreto las partidas presupuestarias».

El presupuesto de 2001 preveía en principio ingresos por 1.013 millones de pesos, el de 2002 otros 1.400 millones de pesos y el de este año superó todas las expectativas de los funcionarios de la cartera de Hacienda, que estimaron unos 1.600 millones de pesos, pero las regalías lo llevaron a más de 1.700 millones de pesos.

En su primera gestión -entre 1991 y 1995- recién sobre el cierre, Sobisch logró que la Legislatura le aprobara la cuenta de inversión de 1994 y el presupuesto de 1995.

Una alta fuente del Tribunal de Cuentas explicó que el año financiero finaliza el próximo 31 de diciembre. Por lo tanto, los diputados que asuman el 10 de diciembre estarán habilitados para sancionarlo, aunque en los hechos, se ejecutó en su totalidad y sólo se tratará de una rendición de gastos.