Absolvieron a un hombre acusado de proxeneta en Neuquén

NEUQUEN (AN)- Un empleado del gobierno provincial que estuvo preso más de un año, acusado de obligar a una menor de edad a ejercer la prostitución, fue absuelto ayer por la justicia y recuperó su libertad.

Se trata de Leandro Bucarey, de 37 años, quien al ser involucrado en el caso trabajaba en la Dirección General de Información Pública.

La semana pasada fue sometido a juicio oral acusado de «promoción a la prostitución agravada», y en un fallo unánime dictado ayer lo absolvió la Cámara Primera, integrada por Cecilia Luzuriaga, Héctor Dedominichi y Mario Rodríguez Gómez (ambos subrogantes). Los magistrados señalaron que «la conducta del imputado merece un severo reproche moral» pero no un castigo penal.

Bucarey había sido denunciado por la víctima, una joven de 15 años que luego se desdijo de la acusación y la atribuyó a presiones de una ex pareja del imputado.

En su defensa, el empleado provincial señaló entre otros argumentos que desconocía la edad de la jovencita y la actividad a la que se dedicaba por las noches, a pesar de que convivió con ella unos meses.

El fallo consideró probado que la menor «ejerció la prostitución antes y después de conocer a Bucarey». Pero lo que no se pudo demostrar es que el acusado la obligaba a hacerlo.

«Si bien no hay duda del conocimiento que tuvo el imputado de la actividad sexual promiscua de la joven (si bien no en forma concreta), lo cierto es que queda descartado de plano que haya promovido la prostitución de la adolescente, desde que está probado que no la inició en el comercio sexual», afirma la sentencia. También señala que «la menor aparece comportándose libremente sin sujeción a los mandatos de Bucarey, como lo demuestran sus idas y venidas en la época de los hechos».

La Cámara dio por cierto que el empleado provincial solía trasladar a la joven a un pub donde se prostituía, pero «no hay prueba fehaciente de que haya obrado con la finalidad de facilitar el ejercicio de la prostitución».

Al fundamentar su voto, la camarista Luzuriaga señaló que «no escapa a mi criterio que nos encontramos ante un triste caso de prostitución de adolescente, lamentablemente, más frecuente de lo esperable, caso en que, por cierto, como con honestidad intelectual lo señala el defensor (alude a Oscar Pandolfi), la conducta del imputado merece un severo reproche moral, teniendo en cuenta que estaba en condiciones de obrar de otro modo respecto de la menor, (aunque no le fuera exigible otra conducta conforme a derecho). Pero sabemos que la relevancia social, no es lo mismo que la relevancia penal».

En consecuencia, el fallo dispuso absolver al imputado y disponer su inmediata libertad. Estaba detenido desde el 11 de julio pasado, cuando allanaron su vivienda y el pub en el que trabajaba la joven que lo denunció y luego se retractó.


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