Ya no quedan detenidos por el caso Muñoz

Los sospechosos en las causas conexas a la del homicidio ya están en libertad. El fiscal Govetto podría dar a conocer nuevas imputaciones.

Ya no quedan detenidos por el caso Muñoz

Luis Irusta, el único policía que continuaba detenido porque está imputado en una de las causas conexas, que se originaron a partir de la desaparición del oficial ayudante de la Policía de Río Negro, Lucas Muñoz, recuperó su libertad. El juez Marcelo Barrutia, de la Cámara Criminal Primera de Bariloche, hizo lugar al pedido de excarcelación que formuló la defensa del oficial acusado por el delito de allanamiento ilegal y sustracción de pruebas. Irusta permaneció más de tres meses preso.

Uno de sus abogados defensores Gustavo Godoy explicó ayer a “DeBariloche” que Irusta fue liberado el martes en Roca, adonde había sido trasladado días atrás tras haber permanecido preso varias semanas en una dependencia de la PSA, en el aeropuerto de Bariloche.

Godoy explicó que Barrutia resolvió hacer lugar al pedido de excarcelación que habían pedido, junto con el defensor particular Rodolfo Rodrigo, porque alegaron que la instrucción de la causa ya está terminada. El fiscal Martín Govetto se opuso a concederle la excarcelación a Irusta.

Para los defensores no hay riesgo procesal y correspondía otorgar la libertad a Irusta. Además, recordaron que la causa ya fue elevada a juicio y sólo falta definir la fecha. Señalaron además que el delito que se le atribuye a Irusta tiene como pena máxima 2 años de prisión y, por lo tanto, es excarcelable.

Irusta está acusado de haber allanado la noche del 14 de julio pasado, junto con el oficial, Maximiliano Morales, el domicilio de Muñoz sin orden judicial. Los oficiales revisaron un ropero, carpetas que había en el lugar y la computadora. Morales era amigo de Muñoz, que había desaparecido horas antes y nadie sabía su paradero. Muñoz estuvo 27 días desaparecido.

Su desaparición generó dos causas conexas vinculadas a un presunto entorpecimiento policial en la búsqueda de Muñoz, cuyo cadáver hallaron 10 de agosto pasado, en un descampado ubicado en las afueras de Bariloche. Tenía un tiro en la nuca y otro en la pantorrilla derecha.

El fiscal Guillermo Lista imputó a Irusta y Morales por el allanamiento ilegal. También acusó al sargento Néstor Meyrelles y al oficial Federico Valenzuela por los delitos de encubrimiento agravado y abuso de autoridad.

Meyreles y Valenzuela estuvieron 55 y 42 días detenidos respectivamente. Recuperaron a finales de septiembre pasado la libertad tras el fallo de la Cámara Criminal Segunda que hizo lugar parcialmente al recurso de apelación que había presentado la defensa de los imputados.

Morales nunca estuvo preso. Mientras que Irusta fue detenido el 7 de agosto pasado en el domicilio de sus padres, en Carmen de Patagones. Lo arrestaron porque se marchó de Bariloche sin autorización judicial.

Govetto está a cargo de la investigación por el homicidio de Muñoz, que aún no tiene imputados. También tiene las causas conexas. Fuentes judiciales revelaron que Govetto informará en las próximas horas de nuevas imputaciones contra uno o más oficiales de la Policía de Río Negro. No trascendió ningún detalle de la acusación que el fiscal promoverá. Sólo informaron que están vinculadas con las causas conexas.


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