Carpa de municipales en reclamo de nombramientos

NEUQUEN- La promesa de que revisará «cada caso» fue lo único que pudieron arrancar del futuro gobierno local los municipales que reclaman estabilidad laboral después del 10, al cierre de una jornada signada por asambleas y movilizaciones. Anoche, tenían previsto instalar una carpa de protesta frente al edificio comunal por «tiempo indefinido».

La desesperación inicial de los trabajadores dio paso a una fuerte ofensiva que comenzó en la cartera de Trabajo y que proseguirá hoy en la justicia para que revise la medida cautelar que afectó su situación laboral.

La resolución interlocutoria del Tribunal Superior de Justicia «suspendió» los efectos del decreto del intendente Luis Jalil que designaba a 135 empleados «de gabinete» a planta permanente pasando por encima de concursos públicos.

«Somos cafeteros, administrativos y personal de maestranza que ganamos 500 pesos y lo único que pedimos es que nos dejen trabajar», reclamaron y para reafirmar su condición de empleados aseguraron que «muchos trabajamos hace ocho años en el municipio y por eso no pueden llamarnos contratados».

Por la mañana se movilizaron hacia el Deliberante con la esperanza de ser recibidos por el intendente electo Horacio Quiroga. Pero el concejal había faltado a la sesión especial. En su reemplazo fueron atendidos por el futuro presidente del Concejo, Humberto Zambón.

Por todos los medios trataron de comprometerlo para frenar la disposición judicial y obtener una audiencia con Quiroga. Luego, para obtener el número telefónico y la dirección de la casa donde se mudó el político recientemente. Pero Zambón no les dio la información requerida y por el contrario insistió que «la decisión de no validar el decreto fue judicial y no municipal».

Recordó que «el único modo de ingresar es por concurso y en igualdad de condiciones» y tras señalar que el estatuto también habla de «inmovilidad en los cargos después de seis meses», infirió que la cuestión de fondo en la justicia pasaría por resolver si la estabilidad es automática o sólo concurso por medio.

Con todo, accedió a comunicarse por teléfono con Quiroga. Se encerró en su despacho y contra lo que esperaban los municipales, al salir les dijo que no lo ubicó. En su defecto, continuó, habló con el futuro secretario de Gobierno, Alberto Maglieta, quien «se comprometió a revisar caso por caso» dijo sin especificar cuándo y en cuánto tiempo.

El grupo que aguardaba en la puerta del edificio custodiado por policías se ofuscó y regresó raudo al palacio municipal, donde contó con el apoyo del intendente Luis Jalil, quien se erigió en una especie de «padre salvador». Una asamblea decidió que se presentaran a trabajar el lunes 13 -primer día hábil después de la asunción del nuevo gobierno- y si se lo impiden plantearán un recurso de amparo en el juzgado laboral. La propuesta de Sitramune de prorrogar los contratos fue rechazada en medio de fuertes críticas porque supondría admitir que no son de planta.

En este escenario el dirigente Néstor Morales, que está organizando un sindicato paralelo, volvió a asumir un rol protagónico como interlocutor de Jalil en representación del grupo.

Mientras tanto Graciela Sánchez, secretaria general de Sitramune, ratificó que «Jalil tiene autoridad y firma para prorrogar los contratos» y lo culpó de generar esta situación. «No puede desconocer que cada vez que viole la Carta Orgánica la justicia fallara en contra», indicó.